Xie Li, Estados Unidos
Solía ser alguien que perseguía las tendencias del mundo, quería rendirme a una vida de placer y sólo me importaban los placeres de la carne. A menudo pasaba toda la noche en el karaoke con mis amigos, me escapaba en mitad de la noche, salía al océano a pescar y viajaba por todas partes en busca de buena comida. Veía a quienes me rodeaban; ellos también se esforzaban por comer bien, llevar ropa bonita y disfrutar de las cosas buenas. Sentía que estas eran las cosas por las que uno debe trabajar en la vida, que por eso debes trabajar duro para ganar dinero, que este es el objetivo que todos deberían tener en la vida. Sólo con estas cosas la vida no sería en vano. Para obtenerlas, no me importaba la distancia que tuviera que recorrer, así que crucé el océano para venir a Estados Unidos y, después de esforzarme durante varios años, abrí mi propio negocio. Tenía mi propio auto y mi propia casa. Estaba viviendo la vida bendita con la que había soñado. Todos los días comía, bebía y buscaba placeres hasta saciarme y hasta que mi corazón estuviera satisfecho. Pensaba que la vida sólo tenía sentido viviendo de esta manera, y así fue hasta que recibí la obra de Dios Todopoderoso en los últimos días. Sólo después de experimentar el juicio y el castigo de Dios me di cuenta de qué es una vida verdaderamente significativa y luego empecé a caminar por la senda luminosa de la vida.