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6. ¿Por qué se dice que las dos encarnaciones de Dios completan el significado de la encarnación?

Versículos bíblicos como referencia:

[…] así también Cristo, habiendo sido ofrecido una vez para llevar los pecados de muchos, aparecerá por segunda vez, sin relación con el pecado, para salvación de los que ansiosamente le esperan (Hebreos 9:28).

En el principio existía el Verbo, y el Verbo estaba con Dios, y el Verbo era Dios (Juan 1:1).

Palabras relevantes de Dios:

La primera encarnación fue para redimir al hombre del pecado por medio de la carne de Jesús, esto es, Él salvó al hombre desde la cruz, pero el carácter satánico corrupto permaneció en el ser humano. La segunda encarnación ya no es para que sirva de ofrenda por el pecado, sino para salvar por completo a los que fueron redimidos del pecado. Esto se hace de tal forma que los perdonados puedan ser librados de sus pecados, ser purificados completamente, y alcanzar un cambio de carácter, liberándose así de la influencia de las tinieblas de Satanás y regresando delante del trono de Dios. Sólo así puede el hombre ser plenamente santificado. Dios comenzó la obra de salvación en la Era de la Gracia, después de que la Era de la Ley llegara a su fin. No es sino hasta los últimos días, cuando Dios haya purificado totalmente a la humanidad, mediante la obra de juicio y castigo del hombre por la rebeldía, que Dios concluirá Su obra de salvación y entrará en el reposo. Por tanto, en las tres etapas de la obra, Dios sólo se hizo carne dos veces para llevar a cabo Su obra por sí mismo entre los hombres. Esto se debe a que sólo una de las tres etapas de la obra consiste en guiar al hombre en su vida, mientras las otras dos son la obra de salvación. Sólo si Dios se hace carne puede vivir junto al hombre, experimentar el sufrimiento del mundo, y vivir en una carne ordinaria. Sólo de esta forma puede proveer al hombre de Su creación con el verbo práctico que necesita. El hombre recibe la salvación total de Dios gracias al Dios encarnado, no directamente de sus oraciones al cielo. Y es que el hombre es de carne; el hombre es incapaz de ver al Espíritu de Dios y mucho menos de acercarse a Él. Todo aquello con lo que el hombre puede relacionarse es la carne encarnada de Dios; sólo a través de Él puede el hombre entender todo el verbo y todas las verdades, y recibir la salvación plena. La segunda encarnación es suficiente para eliminar los pecados del hombre y purificarlo plenamente. Así pues, la segunda encarnación pondrá fin a toda la obra de Dios en la carne y completará el sentido de la encarnación de Dios.

de ‘El misterio de la encarnación (4)’ en “La Palabra manifestada en carne”

Cuando Jesús estaba haciendo Su obra, el conocimiento que el hombre tenía de Él seguía siendo vago y poco claro. Siempre creyó que Él era el hijo de David y proclamó que era un gran profeta y el Señor benevolente que redimía los pecados del hombre. Algunos, basándose en la fe, se curaron simplemente tocando el borde de Sus vestiduras; los ciegos podían ver e incluso los muertos ser restaurados a la vida. Sin embargo, el hombre no podía descubrir el carácter satánico corrupto profundamente arraigado en él ni sabía cómo desecharlo. El hombre recibió mucha gracia, como la paz y la felicidad de la carne, la bendición de toda la familia sobre la fe de uno, la curación de las enfermedades, etc. El resto era las buenas obras del hombre y su apariencia piadosa; si este podía vivir en base a eso, se le consideraba un buen creyente. Sólo tales creyentes podrían entrar en el cielo tras la muerte, lo que significa que fueron salvos. Pero durante su vida, no entendieron en absoluto el camino de la vida. Simplemente cometían pecados y después confesaban, en un ciclo continuo sin camino alguno hacia un carácter cambiado; así era la condición del hombre en la Era de la Gracia. ¿Ha recibido el hombre la salvación completa? ¡No! Por tanto, después de completarse esta etapa, aún queda la obra de juicio y castigo. Esta etapa hace al hombre puro por medio de la palabra al darle una senda que seguir. La misma no sería fructífera ni tendría sentido si continuase con la expulsión de demonios, porque la naturaleza pecaminosa del hombre no sería abandonada y el hombre sólo se detendría tras el perdón de los pecados. A través de la ofrenda por el pecado, estos se le han perdonado al hombre, porque la obra de la crucifixión ya ha llegado a su fin y Dios ha vencido a Satanás. Pero el carácter corrupto del hombre sigue en él y este todavía puede pecar y resistir a Dios; Dios no ha ganado a la humanidad. Esa es la razón por la que en esta etapa de la obra Dios usa la palabra para revelar el carácter corrupto del hombre y pide a este que practique de acuerdo con el camino adecuado. Esta etapa es más significativa que la anterior y también más fructífera, porque, ahora, la palabra es la que provee directamente la vida del hombre, y permite que su carácter sea completamente renovado; es una etapa de obra más concienzuda. Así pues, la encarnación en los últimos días ha completado el sentido de la encarnación de Dios y ha terminado por completo el plan de gestión de Dios para la salvación del hombre.

de ‘El misterio de la encarnación (4)’ en “La Palabra manifestada en carne”

El primer Dios encarnado no completó la obra de la encarnación, sino sólo el primer paso de la obra que Dios debía realizar en la carne. Así pues, con el fin de terminar la obra de la encarnación, Dios ha regresado en la carne una vez más y vive toda la normalidad y la realidad de la carne; es decir, manifiesta el Verbo de Dios en una carne totalmente normal y ordinaria, concluyendo de esta forma la obra que Él dejó sin realizar en la carne. La segunda carne encarnada es esencialmente parecida a la primera, pero es incluso más real aún, incluso más normal que la primera. Como consecuencia, el sufrimiento que la segunda carne encarnada soporta es mayor que el de la primera, pero este sufrimiento es una consecuencia de Su ministerio en la carne, el cual es diferente del sufrimiento que el hombre corrupto tendría que padecer. También brota de la normalidad y de la realidad de Su carne. Como Él realiza Su ministerio en una carne totalmente normal y real, esta debe soportar muchas dificultades. Cuanto más normal y real sea esta carne, más sufrirá Él en la realización de Su ministerio. Dios obra en una carne muy común, una que no es en absoluto sobrenatural. Como Su carne es normal y también debe cargar con la obra de salvar al hombre, Él sufre en mayor medida de lo que lo haría una carne sobrenatural; todo este sufrimiento brota de la realidad y de la normalidad de Su carne. De los sufrimientos que han padecido las dos carnes encarnadas durante la realización de Sus ministerios, se puede ver la esencia de la carne encarnada. Cuanto más normal sea la carne, mayor la dificultad que debe soportar al emprender la obra; cuanto más real es la carne que emprende la obra, más duras son las nociones que se crean las personas y mayores los peligros que probablemente puedan sobrevenirle. Además, cuanto más real sea la carne y cuanto más posea esta las necesidades y el sentido completo de un ser humano normal, más capaz será Él de asumir la obra de Dios en la carne. Fue la carne de Jesús la que fue clavada en la cruz, Su carne que Él entregó como ofrenda por el pecado; fue por medio de una carne con humanidad normal que Él derrotó a Satanás y salvó totalmente al hombre desde la cruz. Y es como carne completa, que el segundo Dios encarnado lleva a cabo la obra de conquista y derrota a Satanás. Sólo una carne completamente normal y real puede realizar la obra de conquista en su totalidad y dar un testimonio convincente. Es decir, la obra de[a] conquistar al hombre se hace efectiva por medio de la realidad y la normalidad de Dios en la carne, no a través de milagros y revelaciones sobrenaturales. El ministerio de este Dios encarnado consiste en hablar, y, de este modo, conquistar y perfeccionar al hombre; en otras palabras, la obra del Espíritu materializada en la carne y el deber de la carne, es hablar y de este modo conquistar, revelar, perfeccionar y eliminar por completo al hombre. Por tanto, la obra de Dios en la carne se cumplirá en su totalidad en esta obra de conquista. La obra redentora inicial fue sólo el comienzo de la obra de la encarnación; la carne que realiza la obra de conquista completará toda la obra de la encarnación. […] En esta etapa de la obra Dios no lleva a cabo señales y maravillas, de forma que la obra logrará sus resultados por medio de las palabras. Además, en esta ocasión, la obra de Dios encarnado no es sanar a los enfermos ni echar fuera a los demonios, sino conquistar al hombre hablando; lo que quiere decir que la habilidad natural de esta carne encarnada de Dios es hablar palabras y conquistar al hombre, no sanar a los enfermos ni echar fuera a los demonios. Su obra en una humanidad normal no es realizar milagros, ni sanar a los enfermos ni echar fuera a los demonios, sino hablar; y por eso la segunda carne encarnada le parece a las personas más normal que la primera. Las personas ven que la encarnación de Dios no es mentira; pero este Dios encarnado es diferente a Jesús encarnado y aunque ambos son Dios encarnado, no son completamente iguales. Jesús poseía una humanidad normal y ordinaria, pero Él estuvo acompañado por muchas señales y maravillas. En este Dios encarnado, los ojos humanos no verán señales o maravillas, ni sanación de enfermos o expulsión de demonios, ni que ande sobre el mar o ayune durante cuarenta días… Él no realiza la misma obra que Jesús llevó a cabo, no porque Su carne sea esencialmente diferente a la de Jesús, sino porque no es Su ministerio sanar a los enfermos y echar fuera a los demonios. Él no echa abajo Su propia obra ni la interrumpe. Como conquista al hombre a través de Sus palabras reales, no hay necesidad de someterlo con milagros y, por tanto, esta etapa es completar la obra de la encarnación. El Dios encarnado que ves hoy es completamente una carne y no hay nada sobrenatural en Él. Se enferma como los demás, necesita comida y ropa como los demás, ya que es completamente una carne. Si en esta ocasión Dios encarnado llevara a cabo señales y maravillas sobrenaturales, si sanara a los enfermos, echara fuera a los demonios o pudiera matar con una palabra, ¿cómo se realizaría la obra de conquista? ¿Cómo se difundiría la obra entre las naciones gentiles? […] En los últimos días, Dios materializa la obra de conquista en una carne ordinaria, normal; Él no sana a los enfermos ni será crucificado por el hombre, sino que simplemente habla palabras en la carne, conquista al hombre en la carne. Sólo una carne como esta es la carne de Dios encarnado; sólo una carne como esta puede completar la obra de Dios en la carne.

de ‘La esencia de la carne habitada por Dios’ en “La Palabra manifestada en carne”

¿Por qué digo que el sentido de la encarnación no se completó en la obra de Jesús? Porque el Verbo no se hizo enteramente carne. Lo que Jesús realizó fue sólo una parte de la obra de Dios en la carne; Él sólo llevó a cabo la obra redentora y no la de ganar completamente al hombre. Por esta razón, Dios se ha hecho carne una vez más en los últimos días. Esta etapa de la obra también se lleva a cabo en una carne ordinaria, un ser humano completamente normal, uno cuya humanidad no es en absoluto trascendente. En otras palabras, Dios se ha hecho un ser humano completo y es una persona cuya identidad es la de Dios, un ser humano completo, una carne completa, que está llevando a cabo la obra. Para el ojo humano, Él es sólo una carne que no es en absoluto trascendente, una persona muy ordinaria que puede hablar el lenguaje del cielo, que no muestra señales milagrosas, no obra milagros y que mucho menos exhibe la verdad interior sobre la religión en grandes salones de reunión. La obra de la segunda carne encarnada parece a las personas totalmente diferente a la de la primera, tanto así, que ambas parecen no tener nada en común y nada de la primera obra puede verse en esta ocasión. Aunque la obra de la segunda carne encarnada es diferente de la obra de la primera, eso no prueba que Su fuente no sea la misma. Que Su fuente sea o no la misma depende de la naturaleza de la obra realizada por las carnes y no de Sus caparazones corporales. Durante las tres etapas de Su obra, Dios se ha encarnado dos veces y, en ambas ocasiones, la obra de Dios encarnado inaugura una nueva era, abre el paso a una nueva obra. Las encarnaciones se complementan entre sí. Es imposible para el ojo humano percibir que ambas carnes provienen realmente de la misma fuente. Sobra decir que esto escapa a la capacidad del ojo humano o a la de la mente del hombre. Pero en Su esencia son lo mismo, porque Su obra se origina en el mismo Espíritu. Si ambas carnes encarnadas surgen o no de la misma fuente, no puede juzgarse por la era y el lugar en el que nacieron, o por otros factores similares, sino por la obra divina expresada por Ellas. La segunda carne encarnada no lleva a cabo nada de la obra que Jesús realizó, porque la obra de Dios no se ciñe a convenciones, sino que cada vez se abre una nueva senda. La segunda carne encarnada no busca profundizar ni solidificar la impresión de la primera carne en la mente de las personas, sino complementarla y perfeccionarla, profundizar el conocimiento de Dios por parte del hombre, romper todas las reglas existentes en los corazones de las personas y barrer las imágenes erróneas de Dios en sus corazones. Puede decirse que ninguna etapa individual de la obra de Dios puede darle al hombre un conocimiento completo de Él; cada una da sólo una parte, no el todo. Aunque Dios ha expresado Su carácter por completo, debido a las limitadas facultades de entendimiento del hombre, su conocimiento de Dios sigue siendo incompleto. Es imposible, usando un lenguaje humano, transmitir la totalidad del carácter de Dios; ¿cuánto menos puede una sola etapa de Su obra expresar plenamente a Dios? Él obra en la carne bajo la cubierta de Su humanidad normal y uno sólo puede conocerlo por las expresiones de Su divinidad, no por Su caparazón corporal. Dios viene en la carne para permitir al hombre conocerlo por medio de Su obra variada, y no hay dos etapas de Su obra que sean iguales. Sólo de esta forma puede el hombre tener un conocimiento pleno de la obra de Dios en la carne, no confinada a una sola faceta.

de ‘La esencia de la carne habitada por Dios’ en “La Palabra manifestada en carne”

Jesús hizo una etapa de la obra que sólo cumplió con la esencia de "El Verbo era con Dios": La verdad de Dios era con Dios y el Espíritu de Dios era con la carne y era inseparable de Él; es decir, la carne de Dios encarnado estaba con el Espíritu de Dios, que es una prueba mayor de que Jesús encarnado fue la primera encarnación de Dios. Esta etapa de la obra cumplió el significado interno de "La Palabra se hace carne", le dio un significado más profundo a "El Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios", y te permite creer firmemente en las palabras "En el principio era El Verbo". Lo que es igual a decir que en el momento de la creación Dios estaba poseído de Palabras, Sus Palabras eran con Él y eran inseparables de Él, y la era final deja aún más claro el poder y la autoridad de Sus palabras y permite al hombre ver todo Su Verbo, oír todas Sus palabras. Tal es la obra de la era final. […] Como esta es la obra de la segunda encarnación, y la última vez que Dios se hace carne, completa totalmente el significado de la encarnación, lleva a cabo y expone por completo toda la obra de Dios en la carne, y pone fin a la era de Dios en la carne.

de ‘Práctica (4)’ en “La Palabra manifestada en carne”

[…] en la que Dios no hizo la obra de la palabra, sino que se limitó a describir la crucifixión para redimir a toda la humanidad. La Biblia sólo describe la razón por la cual Jesús debía ser crucificado, y los sufrimientos a los que fue sometido en la cruz, y cómo el hombre debería ser crucificado para Dios. Durante aquella era, todo el trabajo realizado por Dios se centró en torno a la crucifixión. Durante la Era del Reino, el Dios encarnado pronuncia palabras para conquistar a todos los que creen en Él. Esto es “la Palabra que aparece en la carne”; Dios ha venido durante los últimos días para hacer esta obra, lo que significa que ha venido a efectuar el significado práctico de la Palabra que aparece en la carne. Él sólo habla palabras y rara vez se producen hechos. Es la esencia misma de la Palabra que aparece en la carne y cuando el Dios encarnado pronuncia Sus palabras, es la aparición de la Palabra en la carne y la Palabra que se hizo carne. “En el comienzo existía el Verbo y el Verbo estaba con Dios, y el Verbo era Dios, y la Palabra se hizo carne”. Esto (la obra de la aparición de la Palabra en la carne) es la obra que Dios llevará a cabo en los últimos días, y es el capítulo final de todo Su plan de gestión; así, Dios tiene que venir a la tierra y manifestar Sus palabras en la carne. Lo que se hace hoy, lo que se hará en el futuro, lo que Dios perfeccionará, el destino final del hombre, los que serán salvos, los que serán destruidos, etc., esta obra que debe realizarse al final se ha declarado con toda claridad, y su total propósito es realizar el significado práctico de la Palabra que aparece en la carne. Los decretos y la constitución administrativos que se emitieron anteriormente, los que serán destruidos, los que entrarán en el reposo, todas esas palabras deben cumplirse. Es la obra realizada por el Dios encarnado, principalmente durante los últimos días. Él hace que las personas comprendan adónde pertenecen los que fueron predestinados por Dios, y adónde pertenecen los que no son predestinados por Él; cómo serán clasificados Su pueblo y Sus hijos, lo que le ocurrirá a Israel y a Egipto. En el futuro, cada una de esas palabras se cumplirá. Los pasos de la obra de Dios se van acelerando. Dios usa la palabra como medio para revelarle al hombre lo que se debe hacer en cada era, lo que el Dios encarnado de los últimos días hará, y el ministerio que Él llevará a cabo; y todas estas palabras tienen el propósito de lograr el significado real de la Palabra que aparece en la carne.

de ‘Todo se realiza por la palabra de Dios’ en “La Palabra manifestada en carne”

Scripture quotations taken from www.LBLA.com . Copyright by The Lockman Foundation.

Dios mismo, el único X



Dios mismo, el único X

Dios es la fuente de vida para todas las cosas (IV)

    Hoy estamos comunicando un tema especial. Para todos y cada uno de vosotros, sólo hay dos cosas principales que debéis conocer, experimentar y entender; ¿y cuáles son estas dos cosas? La primera es la entrada personal de los seres humanos a la vida, y la segunda está relacionada con conocer a Dios. Hoy os doy a elegir: escoged una. ¿Os gustaría escuchar hablar de un tema que tiene relación con la experiencia vital personal de los seres humanos, o de conocer a Dios mismo? ¿Y por qué os doy esa elección? Porque hoy tengo en mente comunicar algunas cosas nuevas sobre conocer a Dios. Pero, independientemente de ello, primero os dejaré escoger entre las dos cosas de las que acabo de hablar. (Elijo la de conocer a Dios.) (Pensamos que comunicar el conocimiento de Dios es mejor también.) ¿Pensáis que lo que hemos estado comunicando recientemente respecto a conocer a Dios es alcanzable? (Cuando Dios enseñó la primera vez, no sentimos que lo fuera. Después de esto, Dios enseñó varias veces más, y, cuando repasamos de nuevo la primera, en los entornos creados por Dios, los hermanos y hermanas prestaron atención a experimentar en ese ámbito.) Es justo decir que está más allá del alcance de la mayoría de las personas. Podría ser que no os convencieran estas palabras. ¿Por qué digo esto? Porque cuando estabais escuchando lo que Yo estaba diciendo antes, independientemente de cómo lo dije, o con qué palabras, cuando lo oísteis fuisteis conscientes, literal y teóricamente, de lo que Yo estaba diciendo; no obstante, una cuestión muy grave con respecto a vosotros fue que no entendíais por qué Yo decía estas cosas, por qué hablaba de estos temas. Este es el quid de la cuestión. Y así, aunque oír estas cosas aumentaba y enriquecía vuestro entendimiento de Dios y Sus hechos, ¿por qué seguís teniendo problemas para conocer a Dios? La razón es esta: después de oír lo que dije, la mayoría de vosotros no entiende por qué lo hice, y qué relación tiene con conocer a Dios. ¿No es así? ¿Con qué tiene que ver vuestra incapacidad de entender la relación que esto guarda con conocer a Dios? ¿Habéis pensado alguna vez sobre esto? Quizás no. La razón por la que no entendéis estas cosas es que vuestra experiencia vital es demasiado superficial. Si el conocimiento y la experiencia de las palabras de Dios por parte de las personas permanece en un nivel superficial, la mayor parte de su conocimiento de Dios será confuso y abstracto; será rudimentario, doctrinal y teórico. En teoría, parece o suena lógico y razonable, pero el conocimiento de Dios que sale de la boca de la mayoría de las personas está vacío. ¿Y por qué digo esto? Porque, en realidad, no tienes claro en tu corazón si las palabras sobre conocer a Dios que salen de tu boca son o no correctas, si son o no precisas. Y así, aunque la mayor parte de las personas han oído mucha información y temas respecto a conocer a Dios, su conocimiento de Él aún tiene que superar la teoría y la doctrina confusa y abstracta.

Dios mismo, el único V


Dios mismo, el único V

La santidad de Dios (II)

    ¡Buenas noches a todos! (¡Buenas noches Dios Todopoderoso!) Hoy, hermanos y hermanas, cantemos un himno. Encontrad uno que os guste y hayáis cantado habitualmente antes. (Nos gustaría cantar un himno de la palabra de Dios “Amor puro sin defecto”.)
    Estribillo: “Amor” alude a una emoción pura sin imperfección, en la que usáis vuestro corazón para amar, sentir y ser atento. En el amor no hay condiciones, barreras ni distancia. En el amor no hay sospecha ni engaño, ni trato, ni astucia. En el amor no hay elección ni nada impuro.
    1. Si sentís un amor así, no engañáis ni os quejáis, ni traicionáis, ni os rebeláis, ni tomáis, ni pedís recibir algo o una cierta cantidad. Si amáis, os sacrificáis de buen grado.
    2. Si vuestro amor es así, soportáis la dificultad con alegría y colaboráis con Dios. Lo abandonáis todo por Dios: vuestra familia, vuestro futuro, vuestra juventud y vuestro matrimonio. De otro modo, vuestro amor no lo sería en absoluto; ¡sólo sería engaño y traición!
    Esta canción ha sido una buena elección. ¿Os gusta cantar este cántico? (Sí.) ¿Qué sentís después de entonarlo? ¿Sois capaces de sentir este tipo de amor dentro de vosotros? (No del todo aún.) ¿Qué palabras del cántico os conmueven hasta lo más profundo? (El amor no establece condiciones, barreras ni distancia. En el amor no existe la sospecha, la astucia ni el engaño. En el amor no hay distancia y nada que no sea puro. Pero dentro de mí sigo viendo impurezas y también veo dónde intento hacer tratos con Dios, ámbitos en los que no doy la talla; por tanto, cuando pienso en mí hoy, en realidad no he alcanzado un tipo de amor puro y sin mancha.) Si no has logrado este tipo de amor puro y sin mancha, ¿qué clase de amor es el tuyo? ¿Qué nivel de amor tienes dentro de ti? (Estoy meramente en la etapa en la que estoy dispuesto a buscar y tengo el anhelo.) Basándote en tu propia estatura y usando tus propias palabras sacadas de tus experiencias personales, ¿qué grado has alcanzado? ¿Engañas, tienes quejas? (Sí.) ¿Tienes exigencias en tu corazón? ¿Hay cosas que quieres y deseas de Dios? (Sí, están estas cosas adulteradas.) ¿En qué circunstancias afloran? (Cuando la situación que Dios ha dispuesto para mí no sea acorde a mis ideas de cómo deberían ser las cosas, o cuando mis deseos no se hayan visto satisfechos, manifestaré este tipo de carácter corrupto.) ¿Cantáis esta canción con frecuencia? ¿Podéis explicar cómo entendéis “amor puro sin defecto”? ¿Y por qué define Dios así el amor? (A mí me gusta este cántico, porque puedo ver realmente que este amor es un amor completo. Sin embargo, me siento bastante alejado de ese nivel. Ahora me encuentro simplemente en la fase en la que estoy dispuesto a sacrificar ciertas cosas y a soportar algún gasto en la búsqueda de la verdad, pero tan pronto como algo afecta a mi propio futuro y destino, siento un conflicto interior. Veo en mi interior que tengo poca confianza en Dios.) (Ahora siento que sigo muy lejos de alcanzar el amor verdadero, pero existen algunos ámbitos en los que he sido capaz de progresar hacia él; una de las formas en que lo hago es a través de la fuerza que las palabras de Dios me dan y otra manera es que en esas situaciones colaboro con Dios por medio de la oración. Sin embargo, cuando ello implica mis opiniones sobre la existencia, siento en ocasiones que no puedo vencerlas.) ¿Has pensado alguna vez en las cosas que podían estar bloqueándote durante esos momentos en que no puedes vencerlas? ¿Has sido introspectivo en estas cuestiones? (Sí, lo he sido y, en su mayor parte mi propio orgullo y vanidad, así como mis expectativas para mi futuro, son una gran obstrucción.) Cuando las expectativas de tu futuro y tu destino son una gran obstrucción, ¿has pensado alguna vez por qué es un estorbo tan grande? ¿Cómo podrían convertirse este futuro y este destino en un obstáculo? ¿Qué quieres de tu futuro y de tu destino? (No tengo ese asunto del todo claro; a veces caigo en situaciones en las que siento que no tengo futuro ni destino, o a veces siento que no tengo destino en lo que Dios me ha revelado. En esos momentos me siento muy débil y percibo que esto se ha convertido en mi propio gran obstáculo. Sin embargo, tras un período de experiencia y por medio de la oración, este estado en el que me encuentro puede alcanzar un punto de inflexión, pero con frecuencia sigo sintiéndome perturbado por esta situación.) ¿A qué te estás refiriendo realmente cuando dices “futuro y destino”? (Significa que cuando Dios ha dispuesto algunas circunstancias para mí, me siento muy lejos de Sus requisitos. A veces me pregunto si Dios me lo revela y siento que no tengo destino ni rumbo, y me siento muy débil.) ¿A qué os estáis refiriendo verdaderamente cuando decís “futuro y destino”? ¿Hay algo a lo que podáis apuntar? ¿Es una imagen o algo que imaginasteis, o algo que pudisteis ver en realidad? ¿Es algo real? (Es el destino.) ¿Qué es el destino? ¿Cuál es tu futuro? En cada uno de vuestros corazones deberíais pensar a qué hacen referencia las preocupaciones que tenéis en vuestro corazón respecto a vuestro futuro y destino. (Es ser salvo y sobrevivir, y la esperanza de llegar a ser poco a poco apto para ser usado por Dios y llevar a cabo mi deber conforme al estándar, a través del proceso de cumplir con mi deber. Dios suele revelar a menudo estas cosas y siento que no doy la talla.) Otros hermanos y hermanas deberían debatir; ¿cómo entendéis “amor puro sin defecto”? (No hay nada impuro en los individuos y no están controlados por su futuro y su destino. Independientemente de cómo los trate Dios, son capaces de obedecer por completo Su obra, así como Sus orquestaciones, y seguirlo hasta el final mismo. Sólo este tipo de amor hacia Dios es puro amor sin imperfecciones. Sólo cuando me comparo a esto descubro que, en los pocos años que llevo creyendo en Dios, es posible que haya sacrificado ciertas cosas de manera superficial o soportado algún gasto, pero no he sido capaz de entregarle mi corazón de verdad a Dios. Cuando Él me deja al descubierto, siento como si me hubiera caracterizado de alguien que no puede ser salvo y me obsesiono con esta condición negativa. Me veo realizando mi deber, pero al mismo tiempo intentando hacer tratos con Dios, e incapaz de amarlo con todo mi corazón, y que mi destino, mi futuro y mi rumbo están siempre en mi mente. Recuerdo que la comunión del hombre afirmó una vez que deberíamos devolver el amor de Dios llevando a cabo nuestro deber, que el amor debe expresarse de verdad y no ser meras palabras vacías. En comparación, me siento muy lejos de este amor.)
    Se diría que habéis cantado a menudo este cántico, que tenéis cierto entendimiento de él, y que existen algunas conexiones con vuestras experiencias actuales. Sin embargo, prácticamente cada uno tiene niveles de aceptación diferentes de cada una de las frases del cántico “Amor puro sin defecto”. Algunas personas están dispuestas, otras buscan dejar de lado su futuro, otras buscan dejar de lado sus familias, otras no quieren recibir nada. Y las hay que se exigen a sí mismas no tener engaño ni quejas, ni rebelarse contra Dios. ¿Por qué querría Dios sugerir este tipo de amor y exigir que las personas lo amen de esta forma? ¿Es este un tipo de amor que las personas pueden alcanzar? Es decir, ¿pueden amar así las personas? Estas pueden ver que no les es posible, porque no poseen en absoluto este tipo de amor; y cuando no lo poseen, y fundamentalmente no saben del amor, Dios habla estas palabras que no les resultan familiares. Debido a que las personas viven en este mundo en su carácter corrupto, si tuvieran este tipo de amor o si uno pudiera poseerlo sin requisitos ni exigencias, estando dispuestos a consagrarse y a soportar sufrimientos, así como a entregar todo lo que es suyo, ¿cómo considerarían otras personas a quien posee este tipo de amor? ¿No sería una persona perfecta? (Sí.) ¿Existe una persona tan perfecta como esa en este mundo? No existe, ¿verdad? Este tipo de persona no existe en absoluto en este mundo, a no ser que viviera en un vacío, ¿verdad? Por tanto, algunas personas por medio de sus experiencias, invierten un gran esfuerzo para ser como estas palabras describían. Lidian consigo mismas, se contienen y hasta renuncian a sí mismas constantemente: soportan sufrimientos y abandonan las interpretaciones erróneas que han tenido. Dejan las formas en que han sido rebeldes a Dios, renuncian a sus propios deseos y anhelos. Pero al final siguen sin poder cumplir esos requisitos. ¿Por qué ocurre esto? Dios dice estas cosas con el fin de proveer un estándar a las personas para que lo sigan, por lo que estas serán conocedoras del estándar que Dios les exige. ¿Pero dice Él en algún momento que las personas deban conseguir esto de inmediato? ¿Dice Dios alguna vez en cuánto tiempo tienen que lograr esto las personas? (No.) ¿Dice Dios alguna vez que las personas deban amarlo de esta forma? ¿Dice eso este pasaje? No, no lo dice. Dios sólo les está hablando a las personas sobre el “amor” al que se estaba refiriendo. En cuanto a que las personas puedan amar y tratar a Dios así, ¿cuáles son los requisitos de Dios? No es necesario alcanzarlos al instante ni de inmediato, porque las personas no pueden hacerlo. ¿Habéis pensado alguna vez qué tipo de condiciones necesitan cumplir las personas con el fin de amar de esta forma? ¿Si estas leen a menudo estas palabras sentirán gradualmente este amor? (No.) ¿Cuáles son, pues, las condiciones? Primero, ¿cómo pueden quedar las personas libres de las sospechas sobre Dios? (Sólo las personas honestas pueden lograrlo.) ¿Y qué decís de quedar libre del engaño? (También tienen que ser personas honestas.) ¿Ser alguien que no quiere hacer tratos con Dios? También debe ser una persona honesta. ¿Y qué os parece no tener malicia? ¿A qué se refiere al decir que no hay elección en el amor? ¿Alude todo esto a ser una persona honesta? Hay muchos detalles en esto; la capacidad de Dios de dar lugar a este tipo de amor o de definirlo, de decirlo de esta forma, ¿qué confirma esto? ¿Podemos decir que Dios posee este tipo de amor? (Sí.) ¿Dónde veis esto? (En el amor que Dios tiene por el hombre.) ¿Es condicional el amor de Dios por el hombre? (No.) ¿Existen barreras o distancia entre Dios y el hombre? (No.) ¿Tiene Dios sospechas sobre el hombre? (No.) Dios observa al hombre, lo entiende, ¿verdad? (Sí.) Hmm, Él entiende realmente al hombre. ¿Es engañoso Dios hacia el hombre? (No.) Como Dios habla de una forma tan perfecta de este amor, ¿serían igual de perfectos Su corazón o Su esencia? ¿Han definido alguna vez las personas el amor de esta manera? (No.) ¿En qué circunstancias ha definido el hombre al amor? ¿Cómo habla el hombre del amor? ¿Acaso no es dar u ofrecer? (Sí.) La definición del amor por parte del hombre es simple y deficiente en esencia.
    La definición del amor por parte de Dios y la forma en que Él habla del mismo guardan relación con un aspecto de Su esencia, ¿pero qué aspecto de la misma? La última vez comunicamos sobre un tema muy importante, un tema que las personas han debatido con frecuencia y han sacado a colación con anterioridad, y es una palabra que aparece a menudo en el curso de la creencia en Dios, aunque una que les parece tanto familiar como extraña a las personas; ¿pero por qué ocurre esto? Es una palabra que procede de las lenguas del hombre, entre los hombres su definición es distinta y confusa; ¿pero cuál es? (Santidad.) Ah, santidad: ese fue el tema de la última vez que comunicamos. Hablamos un poco sobre el mismo, pero nuestra comunicación quedó incompleta. Basándonos en la parte que comunicamos la última vez, ¿consiguieron todos un nuevo entendimiento sobre la esencia de la santidad de Dios? (Sí.) ¿Cuál pensáis que fue el nuevo entendimiento? Es decir, en ese entendimiento o en esas palabras, ¿qué os hizo sentir que vuestro entendimiento de la santidad de Dios era diferente o variable de lo que enseñé sobre la santidad de Dios? ¿Lo recordáis? ¿Dejó alguna impresión? (Dios dice lo que siente en Su corazón; es puro. Este es un aspecto de la santidad.) Eso es parte de ello; ¿hay algo más que añadir? (Hay santidad cuando Dios está furioso con el hombre: no hay imperfección.) (En la autoridad de Dios veo Su perfección, Su fidelidad, Su sabiduría y Su dominio sobre todas las cosas. Entiendo estas cosas.) “Dominio sobre todas las cosas”; esto se refiere a la autoridad de Dios, ahora estamos hablando de Su santidad. (En cuanto a la santidad de Dios, entiendo que Su ira y Su misericordia se encuentran en Su carácter justo. Esto dejó una fuerte impresión en mí. También sacó a relucir que el carácter justo de Dios es único, algo de lo que yo no tenía entendimiento ni definición en el pasado. Pero en Su enseñanza habló de que la ira de Dios es diferente del enojo del hombre. Es algo que ninguna creación posee. La ira de Dios es positiva y con principios; Él la emite debido a Su esencia inherente. La desata porque ve algo negativo. En Su misericordia, también veo que es algo que ninguna creación posee. Aunque el hombre tiene buenas obras y actos justos que se consideran similares a la misericordia, estos son impuros y hay un motivo subyacente. Algunos tipos de esa supuesta misericordia son incluso falsos y vacíos. Pero he visto la salvación de Dios cuando Él muestra misericordia a las personas, y esta misericordia pone al hombre directamente en la senda de la salvación. Coloca a las personas en la pista correcta de la creencia en Dios de manera que reciban su hermoso destino y esperanza. Así pues, Dios posee Su misericordia en Su esencia. Por tanto, aunque Dios fuera a destruir una ciudad por causa de Su ira, como Su esencia es misericordiosa, en cualquier momento o lugar podría mostrar misericordia para salvar y proteger a las personas de esa ciudad. Esto es lo que yo entiendo.) Tienes algún entendimiento del carácter justo de Dios.
    Hace un momento, cuando os formulé algunas preguntas, la mayoría de vosotros reconoció que el amor de Dios es muy grande y real, pero carecéis de conocimiento respecto a Su esencia santa. Expondré este ámbito del conocimiento de la santidad de Dios en nuestro tema de hoy. Con frecuencia, las personas relacionan el carácter justo de Dios con Su santidad, y todas saben y han oído algunos detalles de Su carácter justo. Además, muchas personas combinan a menudo la santidad y el carácter justo de Dios en su comunicación, afirmando que este último es santo. Todo el mundo está familiarizado con la palabra “santo” y esta se usa habitualmente; pero respecto a sus connotaciones, ¿qué expresiones de la santidad de Dios pueden ver las personas? ¿Qué pueden reconocer las personas de lo que Dios ha revelado? Me temo que esto es algo que nadie sabe. Decimos que el carácter de Dios es justo, pero si tomas el carácter justo de Dios y dices que es santo, parece un poco vago, un poco confuso; ¿por qué? Dices que el carácter de Dios es justo, o dices que Su carácter justo es santo, ¿cómo caracterizáis, pues, la santidad de Dios en vuestros corazones? ¿Cómo la entendéis? Es decir, ¿qué ha revelado Dios o qué hay de todo aquello que Él tiene y es, que las personas reconocerían como santo? ¿Has pensado en esto antes? Lo que Yo he visto es que las personas dicen a menudo palabras que se emplean habitualmente o tienen frases que se han dicho una y otra vez, pero ni siquiera saben lo que están diciendo. Exactamente así lo dice todo el mundo y lo dice así de forma habitual, por lo que pasa a ser una frase hecha. Sin embargo, si investigaran y estudiaran realmente los detalles, verían que no saben cuál es el significado real ni a qué hace referencia. Ocurre lo mismo con la palabra “santo”; nadie sabe con exactitud a qué aspecto de la esencia de Dios se hace referencia en relación con Su santidad. Respecto a reconciliar la palabra “santo” con Dios, nadie sabe y los corazones de las personas están confundidos, y son ambiguas en su manera de reconocer que Dios es santo. Pero cuando entras en materia, ¿de qué forma es Dios santo? ¿Lo sabe alguien? Me temo que nadie es lo suficientemente claro en el asunto. Hoy comunicamos sobre reconciliar la palabra “santo” con Dios de modo que las personas puedan ver el contenido real de la esencia de la santidad de Dios, y esto evitará que algunas personas empleen la palabra descuidadamente y digan cosas de manera aleatoria cuando no saben lo que quieren decir, o incluso si son o no correctas y precisas. Las personas siempre lo han dicho así; tú y yo lo hemos dicho, y ha pasado a ser una manera de hablar, con lo que las personas han manchado sin darse cuenta la palabra “santo”.
    En cuanto a la palabra “santo”, a primera vista parece muy fácil de entender, ¿verdad? Como mínimo, las personas creen que “santo” significa limpio, sin mancha, sagrado, y puro, exactamente como en el himno que acabamos de cantar, “Amor puro sin defecto”, donde se ponen juntos “santo” y “amor”, y es correcto; esto es parte de ello, el amor de Dios es parte de Su esencia, pero no es su totalidad. Sin embargo, en opinión de las personas, ven la palabra y tienden a relacionarla con las cosas que ellas mismas consideran puras y limpias, o con cosas que en su criterio personal no tienen mancha ni defecto. Por ejemplo, algunos dicen que la flor de loto es limpia; ¿cómo llegaron a definirla así? (“La flor de loto crece en el lodo, pero florece sin defecto”.) Florece sin defecto del agua sucia, por lo que las personas comenzaron a aplicarle la palabra “santa”. Algunos también consideraron santas las historias de amor que otros crearon, su contenido, o a algunos dignos protagonistas inventados. Además, algunos consideraron que personas de la Biblia, u otros de los que hablan los libros espirituales —como santos, apóstoles u otros que siguieron una vez a Dios mientras Él hacía Su obra— tuvieron experiencias espirituales que fueron santas. Las personas concibieron todas estas cosas y son conceptos propios. ¿Por qué tienen las personas nociones como estas? Hay una razón y es muy simple: es porque las personas viven en medio de un carácter corrupto y moran en un mundo de maldad e inmundicia. Todo lo que ven, todo lo que tocan, todo lo que experimentan es la maldad y la corrupción de Satanás, así como las intrigas, las luchas internas y la guerra que tienen lugar entre las personas bajo la influencia de Satanás. Por tanto, incluso cuando Dios lleva a cabo Su obra en las personas, o cuando les habla y les demuestra Su carácter y esencia, no son capaces de ver o aceptar lo que es la santidad. Aún más, por esta razón, las personas dicen a menudo que Dios es santo. Al vivir estas en medio de la inmundicia y la corrupción, y encontrarse bajo el dominio de Satanás, no ven la luz y no conocen los asuntos o las cosas positivas ni conocen la verdad. Por tanto, nadie sabe realmente qué es santo. Dicho esto, ¿hay cosas o personas santas en medio de esta humanidad corrupta? (No.) Podemos afirmar con certeza que no, no las hay, porque sólo la esencia de Dios es santa. En relación a la santidad de la esencia de Dios, la última vez comunicamos poco sobre ello y sirvió como inspiración para el conocimiento de la santidad de Dios por parte de las personas, pero no es suficiente. No puede ayudar lo suficiente a las personas a conocer por completo la santidad de Dios ni a entender que esta es única. Además, no puede permitir suficientemente a las personas entender el aspecto del verdadero significado de la santidad ya que está completamente personificada en Dios. Por tanto, es necesario que continuemos hablando de este asunto. En la tercera sección, en nuestra comunicación tratamos tres temas, por lo que ahora expondremos el cuarto, y comenzaremos leyendo las escrituras.
4. La tentación de Satanás
    (Mateo 4:1-4) Entonces Jesús fue transportado en espíritu a un lugar solitario para que el diablo lo tentara. Y cuando había ayunado por cuarenta días y cuarenta noches, estaba agotado y con hambre. Y cuando el tentador vino a Él, le dijo: Si Tú eres el Hijo de Dios, di a estas piedras que se vuelvan pan. Pero Él le contestó y dijo: Está escrito, el hombre no vivirá solo de pan pero de cada palabra que salga de la boca de Dios.
    Estas son las palabras con las que el diablo intentó tentar primero al Señor Jesús. ¿Cuál es el contenido de lo que dijo? Sigue adelante y léelo. (“Si Tú eres el Hijo de Dios, di a estas piedras que se vuelvan pan”.) El diablo pronunció estas palabras, que eran bastante simples; ¿pero hay algún problema con el contenido esencial de estas palabras? (Sí.) ¿Cuál es el problema? El diablo dijo: “Si Tú eres el Hijo de Dios”; ¿sabía él, pues, en su corazón que el Señor Jesús era el Hijo de Dios? ¿Sabía que Él era el Cristo? (Sí.) Entonces, ¿por qué dijo “Si eres”? (Estaba intentando tentar a Dios.) Por supuesto, estaba intentando tentar a Dios, ¿pero cuál era su propósito al hacerlo? Dijo: “Si Tú eres el Hijo de Dios”. En su corazón, sabía que Jesucristo era el Hijo de Dios; esto estaba muy claro en su corazón, pero a pesar de ello, ¿se sometió a Él o lo adoró? (No.) ¿Qué quiso hacer? Quiso hacer esto y decir estas palabras para enojar al Señor Jesús, incitarlo a morder el anzuelo, y embaucar al Señor Jesús para que hiciera las cosas según su manera de pensar y que cediera ante él. ¿No era esto lo que pretendía? En su corazón sabía muy bien que aquel era el Señor Jesucristo, pero aun así dijo aquello. ¿No es esta la naturaleza de Satanás? ¿Cuál es la naturaleza de Satanás? (Ser taimado, malvado, y no reverenciar a Dios.) No siente reverencia hacia Dios. ¿Cuál es la acción negativa aquí? ¿Acaso no quería atacar a Dios? Quería usar este método para atacar a Dios, y dijo: “Si Tú eres el Hijo de Dios, di a estas piedras que se vuelvan pan”; ¿no es este, en realidad, el propósito malvado de Satanás? (Sí.) ¿Qué estaba intentando hacer realmente? Su propósito es muy claro: estaba intentando usar este método para refutar la posición y la identidad del Señor Jesucristo. Dijo: “Si eres Hijo de Dios, di que estas piedras se vuelvan en pan. Si no lo haces, entonces no eres el Hijo de Dios y simplemente no haces esta obra”. ¿Es esto lo que quiso decir aquí? Quiso usar este método para atacar a Dios, quiso desmantelar y destruir Su obra; esta es la malevolencia y la malicia de Satanás. Su malevolencia es una expresión natural de su naturaleza. Aunque sabía que el Señor Jesucristo era el Hijo de Dios, la propia encarnación de Dios mismo, no podía evitar hacer este tipo de cosa, siguiendo a Dios de cerca, continuando con su ataque y haciendo grandes esfuerzos para obstaculizar y destruir la obra de Dios, y hacer de Él un enemigo.
    Ahora, analicemos esta frase que Satanás usó: “di a estas piedras que se vuelvan pan”. Convertir piedras en pan; ¿significa esto algo? No tiene sentido. Si hay comida, ¿por qué no comerla? ¿Por qué es necesario convertir piedras en alimentos? ¿Hay algún sentido aquí? (No.) Aunque estaba ayunando en ese momento, ¿seguro que el Señor Jesús tenía alimentos para comer? ¿Tenía comida? (Tenía.) Así pues, aquí vemos lo ridículo del uso de esta frase por parte de Satanás. Vemos su ridiculez y absurdez en toda su traición y malicia, ¿verdad? Satanás hace varias cosas. Ves su naturaleza maliciosa y ves que destruye la obra de Dios. Es odioso y exasperante. Pero, por otra parte, ¿percibes una naturaleza infantil y absurda detrás de sus palabras y acciones? (Sí.) Esto es una revelación sobre la naturaleza de Satanás; él tiene esta clase de naturaleza y hará este tipo de cosa. Para los hombres, la frase es ridícula e irrisoria. Pero Satanás puede pronunciar de verdad esta clase de palabras. ¿Podemos decir que es ignorante? ¿Absurdo? La maldad de Satanás está en todas partes y se revela constantemente. ¿Y cómo responde a ella el Señor Jesús? (“el hombre no vivirá solo de pan pero de cada palabra que salga de la boca de Dios”.) ¿Tienen algún poder estas palabras? (Lo tienen.) ¿Por qué decimos que tienen poder? (Son la verdad.) Correcto. Estas palabras son la verdad. Ahora bien, ¿vive el hombre sólo de pan? El Señor Jesús ayunó durante cuarenta días y cuarenta noches. ¿Murió de hambre? (No.) No murió de hambre, por lo que Satanás se acercó a Él, incitándolo a convertir las piedras en comida diciendo cosas de este tipo: “Si conviertes estas piedras en comida, ¿no tendrás cosas que comer? ¿No evitarás tener que ayunar, y pasar hambre?”. Pero el Señor Jesús dijo: “el hombre no vivirá solo de pan”, que significa que, aunque el hombre vive en un cuerpo físico, lo que le da la vida, lo que permite que su cuerpo físico viva y respire, no es la comida, sino todas las palabras pronunciadas por la boca de Dios. Por un lado, el hombre considera que estas son la verdad. Ellas le proporcionan fe, le hacen sentir que puede depender de Dios, que Él es la verdad. Por otro, ¿hay un aspecto práctico en estas palabras? (Lo hay.) ¿Por qué? Porque el Señor Jesús ha ayunado durante cuarenta días y cuarenta noches y sigue estando ahí, sigue vivo. ¿Es esto una ilustración? Aquí, la idea es que Él no ha comido nada, ningún alimento durante cuarenta días y noches. Y sigue vivo. Es una poderosa evidencia que subyace a Su frase. Esta es simple, pero, en lo que respecta al Señor Jesús, ¿se la enseñó alguien, o pensó en ella por lo que Satanás le había dicho? Piensa en ello. Dios es la verdad. Dios es la vida. ¿Fueron la verdad y la vida de Dios un añadido posterior? ¿Nacieron de la experiencia? (No.) Son innatas en Dios, lo que significa que la verdad y la vida residen en Su esencia. Sea lo que sea que le sobrevenga, lo que Él revela es la verdad. Esta verdad, esta frase —sea largo o corto su contenido— puede permitirle al hombre vivir, le da vida; puede capacitarlo para encontrar, dentro de sí mismo, la verdad, claridad acerca del camino de la vida, y para tener fe en Dios; esta es la fuente del uso de esta frase por parte de Dios. La fuente es positiva. Por tanto, ¿es santa esta cosa positiva? (Sí.) La frase de Satanás procede de su naturaleza. Él revela su naturaleza malvada, maliciosa, en todas partes, constantemente. ¿Pero hace estas revelaciones de manera natural? (Sí.) ¿Le incita alguien? ¿Le ayuda alguien? ¿Le obliga alguien? (No.) Las emite todas por voluntad propia. Esta es la naturaleza malvada de Satanás. Haga Dios lo que haga, y comoquiera que lo haga, Satanás le pisa los talones. La esencia y los verdaderos rasgos de estas cosas que Satanás dice y hace constituyen su esencia: una esencia malvada, maliciosa. Ahora, si seguimos leyendo, ¿qué más dice este? Sigamos leyendo:
    (Mateo 4:5-6) Entonces el diablo lo llevó a la ciudad santa, lo puso en un pináculo del templo y le dijo: Si Tú eres el Hijo de Dios, tírate; porque está escrito: Él enviará Sus ángeles acerca de Ti y en sus manos te sostendrán, para que Tu pie no tropiece sobre una piedra.
    Hablemos primero de esta frase de Satanás. Dijo: “Si Tú eres el Hijo de Dios, tírate”, y después citó las Escrituras: “Él enviará Sus ángeles acerca de Ti y en sus manos te sostendrán, para que Tu pie no tropiece sobre una piedra”. ¿Cómo te sientes cuando oyes las palabras de Satanás? ¿No son muy infantiles? Son infantiles, ridículas y asquerosas. ¿Por qué diría Yo esto? Satanás siempre anda metido en algo necio, cree ser muy listo; y frecuentemente cita las escrituras y hasta la palabra misma de Dios, intenta volver estas palabras contra Dios para atacarle y tentarle. Su propósito al hacerlo es destruir el plan de la obra de Dios. Sin embargo, ¿notas algo en lo que Satanás dijo? (Hay intenciones siniestras en ello.) Satanás siempre ha sido un tentador; no habla de forma directa, siempre lo hace dando rodeos, mediante la tentación, el engaño y la seducción. Satanás tienta de igual forma a Dios y al hombre: piensa que tanto uno como otro son ignorantes, necios e incapaces de distinguir con claridad cómo son las cosas. Satanás piensa que ni uno ni otro verán a través de su esencia ni de su astucia, ni de su siniestra intención. ¿No es ahí donde Satanás obtiene su necedad? (Sí.) Además, cita abiertamente las escrituras; piensa que hacerlo le concede credibilidad, y que no podrás descubrir error alguno en esto ni evitar ser engañado por ello. ¿No es en esto donde Satanás está siendo absurdo e infantil? (Sí.) Es como cuando algunas personas difunden el evangelio y dan testimonio de Dios; ¿no dirán los incrédulos algo parecido a lo que dijo Satanás? ¿Has oído a alguien decir algo parecido? (Sí.) ¿Te sientes asqueado cuando oyes cosas como esas? (Sí.) Cuando te sientes asqueado, ¿sientes también repugnancia y se te revuelve el estómago? (Sí.) Cuando tienes estos sentimientos, ¿eres capaz de reconocer que Satanás y el carácter corrupto que este obra en el hombre son malvados? ¿Habéis llegado alguna vez, en vuestros corazones, a una conclusión como: “Dios nunca habla así. Las palabras de Satanás traen ataques y tentación, son absurdas, irrisorias, infantiles, y repugnantes. Sin embargo, en Su discurso y Sus acciones, Dios nunca usaría métodos como este para hablar o llevar a cabo Su obra, y nunca lo ha hecho”? Por supuesto, en esta situación, las personas sólo tienen un atisbo de sentimiento de seguir adelante y no son conscientes de la santidad de Dios; sólo pueden admitir que la palabra de Dios es verdad, pero no saben que la verdad es santidad en sí misma. Con vuestra estatura actual, estáis sintiendo simplemente esto: “Todo lo que Dios dice es la verdad, es beneficioso para nosotros, y debemos aceptarlo”; independientemente de que seas capaz o no de aceptar esto, afirmas sin excepción que la palabra de Dios es la verdad y que Él es la verdad, pero no sabes que esta es santidad en sí misma y que Dios es santo. Así pues, ¿cuál fue la respuesta de Jesús a las palabras de Satanás?
    (Mateo 4:7) Jesús le dijo: Está escrito nuevamente: No tentarás al Señor tu Dios.
    ¿Hay verdad en esta frase que Jesús dijo? (Sí.) La hay. Superficialmente parece un mandamiento para que las personas lo sigan; es una frase muy simple, pero tanto el hombre como Satanás la han quebrantado con frecuencia. Por tanto, el Señor Jesús le respondió a este: “No tentarás al Señor tu Dios”, porque esto es lo que Satanás hacía a menudo y con todas sus fuerzas. Incluso podrías decir que lo hacía con descaro. No estar en el temor de Dios ni reverenciarlo en su corazón es la naturaleza esencial de Satanás. Por tanto, incluso estando al lado de Dios y pudiéndolo ver, no pudo evitar tentarlo. El Señor Jesús le dijo, pues, a Satanás: “No tentarás al Señor tu Dios”. Esta es una frase que Dios le dirigió con frecuencia. ¿Acaso no es adecuado usar esta frase incluso hoy? (Sí.) ¿Por qué? (Porque nosotros también tentamos a menudo a Dios.) Las personas tientan a Dios, ¿pero por qué lo hacen con tanta frecuencia? ¿Se debe a que están llenas del carácter satánico corrupto? (Sí.) ¿Es entonces lo que Satanás dijo arriba algo que las personas dicen a menudo? (Sí.) ¿En qué situaciones? Se podría decir que las personas han estado diciendo cosas como esta y revelándolas de forma natural, independientemente del tiempo o el lugar. Esto demuestra que el carácter de las personas es exactamente el mismo que el carácter corrupto de Satanás. El Señor Jesús pronunció una frase simple, una que representa la verdad y que las personas necesitan. Sin embargo, ¿estaba el Señor Jesús discutiendo con Satanás en esta situación? ¿Había algo de confrontación en lo que dijo a Satanás? (No.) ¿Cómo veía el Señor Jesús en Su corazón la tentación de Satanás? ¿Se sintió asqueado y repugnado? (Sí.) El Señor Jesús se sintió repugnado y asqueado, pero no discutió con Satanás, y mucho menos habló de grandes principios, ¿no es correcto? (Sí.) ¿Por qué? (El Señor Jesús no quería reconocer a Satanás.) ¿Por qué no quería hacerlo? (Porque Satanás es siempre así, nunca puede cambiar.) ¿Podríamos decir que él es irracional? (Sí, podríamos decirlo.) ¿Puede reconocer Satanás que Dios es la verdad? Nunca lo reconocerá ni lo admitirá; esta es su naturaleza. Además, hay algo más en la naturaleza de Satanás que resulta repulsivo para las personas; ¿qué es? En sus intentos de tentar al Señor Jesús, ¿qué creía en su corazón? Aunque tentara a Dios y no tuviera éxito, lo intentaba de todas formas. Aunque fuera castigado, lo hacía igualmente. Aunque no obtuviera nada bueno de hacerlo, lo llevaba a cabo de igual manera, persistía y se levantaba contra Dios hasta el final. ¿Qué clase de naturaleza es esta? ¿No es malvada? (Sí.) Los que se enfurecen cuando se menciona a Dios, ¿han visto a Dios? Los que se enojan cuando se le menciona, ¿lo conocen? No saben quién es Dios, no creen en Él, y Dios no les ha hablado. Él nunca les ha molestado; ¿por qué habían de enojarse? ¿Podríamos decir que estas personas son malas? (Sí.) ¿Serían personas con una naturaleza malvada? Cualesquiera que sean las tendencias que tienen lugar en el mundo, sea diversión, comida, personas famosas, personas hermosas, nada de esto les molestaría, pero una mención de la palabra “Dios” y se alteran; ¿no sería esto un ejemplo de una naturaleza malvada? Esto sirve como prueba satisfactoria de la naturaleza malvada del hombre. Ahora, hablando de vosotros, ¿hay momentos en los que se menciona la verdad, en los que surgen las pruebas de Dios para la humanidad, o en los que se mencionan las palabras de juicio de Dios contra el hombre, y os sentís enojados, sentís repugnancia, y no queréis hablar de ello? Vuestro corazón puede pensar: ¿Cómo va a ser esto la verdad? ¿No dijeron todas las personas que Dios es la verdad? Esto no es la verdad, ¡estas palabras son simple y claramente las palabras de amonestación de Dios hacia el hombre! Algunas personas pueden incluso sentirse asqueadas en sus corazones: Esto surge cada día, Sus pruebas para nosotros se mencionan cada día al igual que Su juicio; ¿cuándo va a acabar todo esto? ¿Cuándo recibiremos el buen destino? No se sabe de dónde procede esta ira irracional. ¿Qué clase de naturaleza es esta? (Naturaleza malvada.) Viene provocada por la naturaleza malvada de Satanás. En cuanto a Dios con respecto a la naturaleza malvada de Satanás y el carácter corrupto del hombre, Él nunca discute ni se pelea con el hombre, y nunca se queja cuando las personas actúan por ignorancia. No veréis que Dios tenga opiniones sobre las cosas parecidas a las de las personas ni tampoco le veréis usar los puntos de vista de los hombres, su conocimiento, su ciencia, su filosofía o la imaginación del hombre para gestionar las cosas. En su lugar, todo lo que Dios hace y todo lo que revela está relacionado con la verdad. Es decir, cada palabra que Él ha dicho y cada acción que ha llevado a cabo conciernen a la verdad. Esta verdad no es una fantasía sin base; Dios expresa esta verdad y estas palabras debido a Su esencia y Su vida. Como estas palabras y la esencia de todo lo que Dios ha hecho son la verdad, podemos afirmar que la esencia de Dios es santa. En otras palabras, todo lo que Dios dice y hace aporta vitalidad y luz a las personas; les permite ver cosas positivas y la realidad de las mismas, y le señala a la humanidad el camino de la luz para que pueda caminar por la senda correcta. Estas se determinan gracias a la esencia de Dios y debido a la esencia de Su santidad. Lo habéis visto, ¿verdad? Continuaremos con una lectura de las escrituras.
    (Mateo 4:8-11) Una vez más, el diablo lo lleva a una montaña sumamente alta y le muestra todos los reinos de la tierra, así como su gloria, y le dice: Te daré todo esto si te postras y me adoras. Entonces Jesús le dijo: Vete de aquí, Satanás, porque está escrito: Adorarás al Señor tu Dios, y sólo a Él servirás. Entonces el diablo lo dejó y vinieron ángeles a asistirlo.
    Habiendo fracasado Satanás, el diablo, en sus dos artimañas anteriores, intentó una más: mostró todos los reinos del mundo y su gloria al Señor Jesús y le pidió que le adorase. ¿Qué ves respecto a los verdaderos rasgos del diablo a partir de esta situación? ¿No es Satanás el diablo absolutamente descarado? (Sí.) ¿Hasta qué punto puede serlo? Dios lo creó todo, pero Satanás le da la vuelta y se lo muestra a Dios diciendo: “Mira las riquezas y la gloria de todos estos reinos. Si me adoras te los daré todos”. ¿No es esto una inversión de papeles? ¿No es Satanás un desvergonzado? Dios lo hizo todo, ¿pero lo hizo acaso para Su disfrute? Dios dio todo a la humanidad, pero Satanás quería apropiarse de ello, y después dijo: “¡Adórame! Adórame y te lo daré todo”. Este es el feo rostro de Satanás; es absolutamente descarado, ¿verdad? Él ni siquiera conoce el significado de la palabra “vergüenza”, y esto no es más que otro ejemplo de su maldad. Ni siquiera sabe lo que es la “vergüenza”. Satanás sabe claramente que Dios lo creó todo, que Él lo gestiona y lo domina todo. Todo pertenece a Dios, no al hombre, y mucho menos a Satanás, pero este afirmó con absoluto descaro que se lo daría todo a Dios. ¿No está Satanás haciendo una vez más algo absurdo y vergonzoso? Dios aborrece aun más a Satanás ahora, ¿verdad? Sin embargo, independientemente de lo que Satanás intentó hacer, ¿se lo creyó el Señor Jesús? (No.) ¿Qué dijo el Señor Jesús? (“Adorarás al Señor tu Dios”.) ¿Tiene esta frase un significado práctico? (Sí.) ¿Qué clase de significado práctico? Vemos la maldad y la desvergüenza de Satanás en su discurso. Por tanto, si los hombres adoraran a Satanás, ¿cuál sería la conclusión? ¿Recibirían la riqueza y la gloria de todos los reinos? (No.) ¿Qué recibirían? ¿Se volvería la humanidad tan desvergonzada e irrisoria como Satanás? (Sí.) Los hombres no serían diferentes de Satanás entonces. Por tanto, el Señor Jesús pronunció esta frase que es importante para todas y cada una de las personas: “Adorarás al Señor tu Dios, y sólo a Él servirás”. En ella se declara que fuera del Señor, fuera de Dios mismo, si sirves a otro, si adoras a Satanás el diablo, te revuelcas en la misma inmundicia que él. Entonces compartirás la desvergüenza y la maldad de Satanás y, como él, tentarás a Dios y le atacarás. ¿Cuál será entonces tu final? Dios te aborrecerá, te derribará y te destruirá, ¿no es así? Después de haber intentado tentar al Señor Jesús varias veces sin éxito, ¿lo intentó de nuevo Satanás? Ya no lo hizo; se marchó. ¿Qué demuestra esto? Demuestra que la naturaleza malvada de Satanás, su malicia, su absurdez y su ridiculez no merecen mencionarse delante de Dios, porque el Señor Jesús derrotó a Satanás en tan sólo tres frases, tras lo cual este huyó con el rabo entre las piernas, demasiado avergonzado como para mostrar de nuevo su rostro; y nunca más lo tentó. Como el Señor Jesús había derrotado esta tentación de Satanás, ahora podía continuar con facilidad la obra que debía hacer y asumir las tareas que tenía delante de Él. Si se aplicara ahora, ¿conllevaría todo lo que el Señor Jesús dijo e hizo en esta situación algún sentido práctico para todos? (Sí.) ¿Qué clase de sentido práctico? ¿Derrotar a Satanás es algo fácil de hacer? (No.) ¿Qué sería entonces? ¿Deben tener las personas un entendimiento claro de la naturaleza malvada de Satanás? ¿Deben tener las personas un entendimiento preciso de las tentaciones de este? (Sí.) Si alguna vez experimentas las tentaciones de Satanás en tu vida, y eres capaz de ver su naturaleza malvada, ¿serás capaz de derrotarlo? Si sabes de su absurdez y ridiculez, ¿seguirías del lado de Satanás y atacarías a Dios? (No, no lo haríamos.) Si entendieras cómo se revelan a través de ti la malicia y la desvergüenza de Satanás, si reconocieras y conocieras claramente estas cosas, ¿seguirías atacando y tentando a Dios de esta forma? (No, no lo haríamos.) ¿Qué harás? (Nos rebelaremos contra Satanás y lo abandonaremos.) ¿Es eso algo fácil de hacer? (No.) No es fácil. Para hacerlo, las personas deben orar a menudo, presentarse con frecuencia delante de Dios, y autoexaminarse siempre. Deben someterse a la disciplina de Dios así como a Su juicio y castigo, y sólo así escaparán poco a poco del dominio y del control de Satanás.
    Podemos recapitular las cosas que forman la esencia de Satanás a partir de sus palabras. Primeramente, se puede decir en general que la esencia de Satanás es malvada, lo que contrasta con la santidad de Dios. ¿Por qué digo que la esencia de Satanás es malvada? Para comprobarlo, hay que considerar las consecuencias de lo que Satanás hace a las personas. Corrompe y controla al hombre, y este actúa bajo el carácter corrupto de Satanás, habita en un mundo corrompido por este y vive entre personas corruptas. Las masas están involuntariamente poseídas y absorbidas por él y, por tanto, el hombre tiene la naturaleza malvada de Satanás. Podemos ver su arrogancia, su astucia y su malicia en todo lo que ha dicho y hecho. ¿Cómo se exhibe principalmente la arrogancia de Satanás? ¿Quiere él ocupar siempre la posición de Dios? Satanás siempre quiere derribar la obra y la posición de Dios, y tomarlas para sí, de forma que las personas lo sigan, lo apoyen, y lo adoren; esta es la naturaleza arrogante de Satanás. Pero cuando este corrompe a las personas, lo hace de una forma astuta y traicionera: cuando Satanás hace su obra en las personas, no les dice directamente cómo rechazar y oponerse a Dios. Cuando Satanás tienta a Dios, no sale y dice: “Te estoy tentando, voy a atacarte”. ¿Qué método usa, pues? (La seducción.) Seduce, tienta, ataca y pone sus trampas, e incluso cita las escrituras. Satanás habla y actúa de diversas formas para lograr sus motivos siniestros. Después de que Satanás haya hecho esto, ¿qué puede verse a partir de lo manifestado en el hombre? ¿No son arrogantes las personas? El hombre ha sufrido por la corrupción de Satanás durante miles de años y, por tanto, se ha vuelto arrogante y extraordinariamente presuntuoso, taimado, malicioso e irracional, ¿verdad? Todas estas cosas surgen por la naturaleza de Satanás; dado que esta es malvada, se la ha dado al hombre y le ha producido este carácter corrupto. Por tanto, el hombre vive bajo el carácter satánico corrupto y, como Satanás, va en contra de Dios, le ataca, y le tienta hasta el punto de no adorarle ni venerarle en su corazón. ¿Es esto correcto?
    Con respecto a la santidad de Dios, aunque pueda ser un tema familiar, en su exposición podría volverse un poco abstracto para algunas personas, y el contenido podría ser un poco profundo. En el pasado, las personas raramente lidiaron con el tema de la santidad de Dios, y por ello no la entienden. Pero no os preocupéis, os ayudaré a entender qué es la santidad de Dios. Veo que esto os resulta un poco difícil de asimilar; digamos esto en primer lugar: si quieres llegar a conocer a alguien, limítate a observar lo que él o ella hace, y los resultados de sus acciones, y podrás ver la esencia de la persona. Comunicamos, pues, sobre la santidad de Dios desde esta perspectiva, en primer lugar. Dijimos que la esencia de Satanás es malvada y maliciosa, y por tanto sus acciones hacia el hombre se han producido para corromperlo continuamente. Satanás es malvado, por lo que las personas a las que ha corrompido son ciertamente malvadas, ¿verdad? ¿Acaso alguien diría: “Satanás es malvado; quizás alguien a quien él haya corrompido sea santo”? Qué chiste, ¿verdad? ¿Es esto posible? (No.) Por tanto, no pienses en ello de esta forma; hablemos sobre ello desde este aspecto: Satanás es malvado, esta es su esencia y es real, no es mera palabrería vacía. No estamos tratando de difamar a Satanás; sencillamente estamos hablando sobre la verdad y la realidad, así como los hechos que la rodean. Esto podría herir a algunas personas o a un cierto sector de ellas, pero aquí no hay propósito malicioso; quizás podáis oír esto hoy y sentiros un poco incómodos, pero algún día no muy lejano, cuando seáis capaces de reconocerlo, os despreciaréis a vosotros mismos, y sentiréis que esto de lo que hablamos hoy es muy útil para vosotros y muy valioso.
    La esencia de Satanás es malvada, por lo que los resultados de sus acciones son inevitablemente malvados o, como mínimo, están relacionados con su maldad. ¿Podríamos decir esto? (Sí.) ¿Cómo procede, pues, Satanás para corromper al hombre? Primero debemos echar un vistazo en particular a la maldad forjada por Satanás en el mundo y entre la humanidad, la maldad visible y que las personas pueden sentir; ¿habéis pensado antes en esto, alguna vez? Puede ser que no hayáis meditado mucho en ello. Permitidme, por tanto, mencionar varias ideas principales de forma que podáis ver cómo corrompe Satanás al hombre. Existe una teoría llamada evolución; todo el mundo la conoce, ¿verdad? ¿No son esta evolución y este materialismo ámbitos del conocimiento estudiados por el hombre? (Sí.) Por tanto, Satanás usa primero el conocimiento para corromper al hombre, y después la ciencia para suscitar el interés de las personas en el conocimiento, la ciencia y las cosas misteriosas, o en cosas que las personas desean explorar. Con esto quiero decir que Satanás usa el conocimiento científico para corromper al hombre. Las siguientes cosas que Satanás usa para corromper al hombre son la cultura y la superstición tradicionales, y después de esto, utiliza las tendencias sociales. Las personas entran en contacto con todas estas cosas en su vida diaria y todas ellas están relacionadas con otras cosas cercanas a ellas, lo que ven, lo que oyen, lo que tocan y lo que experimentan. Se podría decir que rodean a todos, son inevitables e inextricables. La humanidad no tiene forma de evitar verse influenciada, infectada, controlada y atada por estas cosas; no tiene poder para apartarlas de sí.
    Primero hablaremos sobre el conocimiento. ¿Acaso no consideraría todo el mundo el conocimiento como una cosa positiva? Al menos, las personas piensan que la connotación de la palabra “conocimiento” es positiva en lugar de negativa. ¿Por qué estamos mencionando aquí, pues, que Satanás usa el conocimiento en primer lugar para corromper al hombre? ¿No es la teoría de la evolución un aspecto del conocimiento? ¿No son las leyes científicas de Newton parte del conocimiento? La fuerza de la gravedad de la tierra es parte del conocimiento, ¿verdad? (Sí.) ¿Por qué se enumera este entonces entre el contenido que Satanás usa para corromper la humanidad? ¿Cuál es vuestra opinión sobre esto? ¿Encierra el conocimiento un ápice de verdad? (No.) ¿Cuál es entonces la esencia del conocimiento? (Va en contra de la verdad.) ¿Sobre qué base se aprende el conocimiento que el hombre estudia? ¿Se basa en la teoría de la evolución? ¿Acaso no se basa en el ateísmo el conocimiento que el hombre ha explorado, la totalidad de este? (Sí.) Por tanto, ¿tiene relación con Dios algo de este conocimiento? ¿Tiene relación con adorar a Dios? ¿Tiene relación con la verdad? (No.) ¿Cómo usa Satanás el conocimiento para corromper al hombre? Acabo de decir que nada de este conocimiento tiene relación con adorar a Dios o con la verdad. Algunas personas piensan en ello así: “Podría no tener nada que ver con la verdad, pero no corrompe a las personas”. ¿Cuál es vuestra opinión sobre esto? ¿Te enseñó el conocimiento que la felicidad de las personas dependía de lo que crearan con sus propias manos? ¿Te enseñó alguna vez el conocimiento que el destino del hombre estaba en sus propias manos? (Sí.) ¿Qué es este tipo de discurso? (Un sinsentido.) ¡Correcto! ¡Es un sinsentido! El conocimiento es complicado de exponer. Puedes decir sin rodeos que un campo de conocimiento no es nada más que conocimiento. Es un campo de conocimiento aprendido sobre la base del ateísmo y la falta de entendimiento de que Dios creó todas las cosas. Cuando las personas estudian este tipo de conocimiento, no ven que Dios tiene dominio sobre todas las cosas, no ven que está a cargo de ellas o gestionándolas. En su lugar, todo lo que hacen es investigar, explorar y buscar incesantemente respuestas científicas en ese ámbito de conocimiento. Sin embargo, si las personas no creen en Dios y sólo buscan la investigación en su lugar, nunca encontrarán las verdaderas respuestas, ¿no es así? El conocimiento sólo te da un sustento, sólo te proporciona un trabajo, sólo provee ingresos para que no pases hambre, pero nunca te ayudará a conocer a Dios, a creer en Él, a obedecerle, y nunca te mantendrá lejos del mal. Cuanto más estudies el conocimiento más desearás rebelarte contra Dios, investigarlo, tentarlo e ir contra Él. Así que ahora, ¿qué vemos que el conocimiento está enseñando a las personas? Todo ello es la filosofía de Satanás. ¿Tienen relación con la verdad las filosofías y las reglas de supervivencia de Satanás encontradas en los hombres corruptos? (No.) No tienen nada que ver con la verdad y, de hecho, son lo contrario a ella. Las personas dicen a menudo: “La vida es movimiento”; ¿qué clase de discurso es este? (Un sinsentido.) Las personas también afirman: “El hombre es hierro, el arroz es acero, el hombre se siente hambriento si se salta una comida”; ¿qué es esto? (Un sinsentido, las palabras de Satanás.) Es una falacia aun peor y es repugnante escucharla. Por tanto, el conocimiento es algo de lo que quizás todos sepan. En el supuesto conocimiento del hombre, Satanás ha inoculado bastante de su filosofía de la vida y de su pensamiento. Y cuando lo hace, Satanás permite al hombre tomar prestado su pensamiento, su filosofía y su punto de vista, de forma que pueda negar la existencia de Dios, Su dominio sobre todas las cosas y sobre el destino del hombre. Así pues, a medida que progresa el estudio del hombre, siente que la existencia de Dios se vuelve más confusa conforme adquiere más conocimiento, y podría incluso sentir que Él no existe por culpa de los puntos de vista, los conceptos y los pensamientos que Satanás ha añadido en la mente del hombre. Cuando Satanás pone estos pensamientos en la mente del hombre, ¿no corrompen estos a las personas? (Sí.) ¿En qué basa el hombre su vida ahora? ¿Está dependiendo realmente de su conocimiento? No; el hombre está basando su vida en los pensamientos, las opiniones y las filosofías de Satanás escondidos en este conocimiento. Ahí está el núcleo de la corrupción de Satanás; este es su objetivo y su método para corromper al hombre.
A. Cómo usa Satanás el conocimiento para corromper al hombre
    Primero hablaremos del aspecto más superficial de este tema. Cuando tomabais lecciones de chino en la escuela, ¿podían corromper a las personas el lenguaje y la escritura? No podían. ¿Pueden corromper las palabras a las personas? (No.) Las palabras no corrompen a las personas; son una herramienta con la que estas pueden hablar y comunicarse con Dios. Además, el lenguaje y las palabras son el medio con el que Dios se comunica con las personas ahora, son herramientas, una necesidad. Uno más uno igual a dos, esto es conocimiento, ¿verdad? Dos multiplicado por dos igual a cuatro, esto es conocimiento, ¿verdad? ¿Pero puede esto corromperos? Esto es sentido común y una regla, por lo que no puede corromper a las personas. ¿Qué conocimiento lo hace entonces? Aquel en el que se mezclan los puntos de vista y los pensamientos de Satanás. Él busca inocular estos puntos de vista y pensamientos en la humanidad por medio del conocimiento. Por ejemplo, en un ensayo, ¿hay algo malo en las palabras escritas? (No.) Entonces, ¿dónde radicaría el problema? Los puntos de vista y el propósito del autor cuando escribió el ensayo así como el contenido de sus pensamientos, estas son cosas espirituales, pueden corromper a las personas. Por ejemplo, si estuvieras viendo un programa de televisión, ¿qué tipo de cosas en él podría cambiar tu opinión? ¿Podrían corromper a las personas lo que dijeran los participantes, las palabras en sí mismas? (No.) ¿Qué tipo de cosas corrompería a las personas? Serían los pensamientos y el contenido principal del programa, que representarían las opiniones del director, y la información transmitida en estas opiniones podría influenciar los corazones y las mentes de las personas. ¿Es correcto? (Sí.) ¿Sabéis a qué me estoy refiriendo en Mi exposición de cómo Satanás usa el conocimiento para corromper a las personas? (Sí.) No lo entenderéis mal, ¿verdad? Por tanto, cuando leas una novela o un ensayo de nuevo, ¿puedes evaluar si los pensamientos expresados en el ensayo corrompen a la humanidad o contribuyen en ella? (Podemos hacerlo un poco.) Esto es algo que debe estudiarse y experimentarse a un ritmo lento, no puede entenderse fácilmente al instante. Por ejemplo, cuando se investiga o estudia un ámbito del conocimiento, algunos aspectos positivos del mismo pueden ayudarte a entender algún sentido común sobre ese campo, y lo que las personas deberían evitar. Por ejemplo, la “electricidad” es un campo del conocimiento, ¿verdad? Serías ignorante si no supieras que la electricidad puede electrocutar a las personas, ¿verdad? Pero una vez que entiendas este ámbito del conocimiento, no serás descuidado cuando toques algo eléctrico y sabrás cómo usar la electricidad. Ambas cosas son positivas. ¿Tenéis claro lo que estamos exponiendo respecto a cómo corrompe el conocimiento a las personas? (Sí.) Si lo entendéis no continuaremos hablando más de ello, porque hay muchos tipos de conocimiento estudiados en el mundo y debéis tomaros vuestro tiempo para diferenciarlos por vosotros mismos.
B. Cómo usa Satanás la ciencia para corromper al hombre
    ¿Qué es la ciencia? ¿No goza la ciencia de un gran prestigio y de una alta consideración en la mente de todo el mundo? (Sí.) Cuando se menciona la ciencia, ¿no sienten las personas: “Esto es algo que la gente normal no puede comprender, es un tema que sólo los investigadores o expertos científicos pueden tocar. No tiene ninguna relación con nosotros la gente normal”? ¿Guarda, sin embargo, alguna relación? (Sí.) ¿Cómo usa Satanás la ciencia para corromper a las personas? No hablaremos de otras cosas que no sean lo que las personas encuentran con frecuencia en su propia vida. Habéis oído hablar de los genes, ¿verdad? (Sí.) Estáis todos familiarizados con este término, ¿no es cierto? ¿Se descubrieron los genes por medio de la ciencia? ¿Qué significan exactamente los genes para las personas? ¿No hacen sentir a las personas que el cuerpo es una cosa misteriosa? Cuando se presenta este tema a las personas, ¿no habrá algunos en especial los curiosos que querrán saber más o querrán más detalles? Estas personas curiosas centrarán su energía en este asunto y cuando no estén ocupadas buscarán información en libros y en internet para conocer más detalles sobre ello. ¿Qué es la ciencia? Hablando claramente, es los pensamientos y las teorías sobre las cosas que despiertan la curiosidad de los hombres, cosas desconocidas, que Dios no les ha contado; la ciencia es los pensamientos y las teorías de los misterios que el hombre quiere explorar. ¿Cuál piensas que es el ámbito de la misma? Podrías decir que engloba todas las cosas; ¿pero cómo realiza el hombre la obra de la ciencia? ¿Lo hace por medio de la investigación? Esta implica investigar los detalles y las leyes de estas cosas, y seguidamente formular teorías discutibles sobre las que todo el mundo piensa: “¡Estos científicos son realmente fantásticos! ¡Saben tanto y tienen tanto conocimiento para entender estas cosas!”. Sienten una gran admiración por estas personas, ¿verdad? ¿Qué tipo de opiniones tienen las personas que investigan la ciencia? ¿Acaso no quieren investigar el universo, las cosas misteriosas en su ámbito de interés? ¿Cuál es el resultado final de esto? Algunas ciencias cuentan con personas que sacan sus conclusiones a partir de conjeturas, otras tienen personas que se apoyan en la experiencia humana para llegar a las mismas e incluso otro campo de las ciencias tendrá personas que lleguen a sus conclusiones basándose en la experiencia o las observaciones históricas y de los antecedentes. ¿Es esto correcto? (Sí.) ¿Qué hace, pues, la ciencia por las personas? Sólo les permite ver los objetos del mundo físico y simplemente satisface la curiosidad del hombre; no le permite al hombre ver las leyes por las que Dios tiene dominio sobre todas las cosas. El hombre parece encontrar respuestas en la ciencia, pero estas son desconcertantes y sólo traen satisfacción temporal, una satisfacción que sólo sirve para confinar el corazón del hombre al mundo físico. Los hombres sienten que ya han obtenido las respuestas de la ciencia a cualquier asunto que surja, creen firmemente en sus opiniones científicas para demostrarlo o aceptarlo. La ciencia posee y seduce el corazón del hombre hasta el punto en que este ya no tiene la mentalidad para conocer a Dios, adorarlo y creer que todas las cosas proceden de Él, y que debería buscar las respuestas en Él. ¿No es esto cierto? Puedes ver que cuanto más creen las personas en la ciencia, más absurdas se vuelven, creyendo que todo tiene una solución científica, que la investigación puede resolverlo todo. No buscan a Dios ni creen que Él exista; incluso algunas personas que han seguido a Dios durante muchos años irán e investigarán bacterias por capricho o buscarán información para obtener respuestas. Una persona así no aborda los asuntos desde la perspectiva de la verdad y en la mayoría de los casos quiere apoyarse en opiniones o respuestas científicas para resolver los problemas; pero no se apoya en Dios ni lo buscan. ¿Tienen a Dios en sus corazones estas personas? (No.) Hay incluso algunas que quieren investigar a Dios de la misma forma como estudian la ciencia. Por ejemplo, muchos expertos religiosos han ido al lugar en el que reposó el arca después del gran diluvio. Han visto el arca, pero no ven la existencia de Dios en el aspecto del arca. Sólo creen en los relatos y la historia, y este es el resultado de su investigación y estudio científicos del mundo físico. Si investigas cosas materiales, ya sea la microbiología, la astronomía, o la geografía, nunca encontrarás un resultado que diga que Dios existe o que tiene dominio sobre todas las cosas. ¿Es esto correcto? (Sí.) ¿Qué hace, pues, la ciencia por el hombre? ¿No lo distancia de Dios? ¿No está permitiendo esto que las personas estudien a Dios? ¿No hace esto que las personas duden más sobre la existencia de Dios? (Sí.) ¿Cómo quiere usar, pues, Satanás la ciencia para corromper al hombre? ¿Acaso no quiere utilizar conclusiones científicas para engañar y paralizar a las personas? Satanás usa las respuestas ambiguas para agarrar los corazones de las personas de forma que estas no busquen ni crean en la existencia de Dios, y de esta forma recelen de Él, lo nieguen y se distancien de Él. Así pues, esta es la razón por la que decimos que es una de las formas mediante las cuales Satanás corrompe a las personas.
C. Cómo usa Satanás la cultura tradicional para corromper al hombre
    ¿Son muchas las cosas que se consideran parte de la cultura tradicional? (Sí.) ¿Qué significa esta cultura tradicional? (Se ha transmitido desde los antepasados.) Se ha transmitido desde los antepasados, este es un aspecto. Familias, grupos étnicos e incluso la raza humana han transmitido sus formas de vida desde el principio, o sus costumbres, dichos y normas, que se han instilado en la mente de las personas. ¿Qué hacen las personas con estas cosas? Las consideran inseparables de sus vidas. Toman estas cosas y las consideran reglas y vida que observar, y nunca están dispuestas a cambiarlas o abandonarlas porque se las transmitieron sus ancestros. Existen otros aspectos de la cultura tradicional, como los transmitidos por Confucio o Mencio, o las doctrinas del taoísmo y el confucianismo chinos, que han pasado a ser parte integrante de cada persona hasta lo más profundo. ¿No es esto correcto? (Sí.) ¿Qué incluye esta cultura tradicional? ¿Incluye las festividades que celebran las personas? Por ejemplo, por orden de importancia, están la Fiesta de la Primavera, la Fiesta de los Faroles, el Día de Limpieza de Tumbas, la Fiesta del Barco del Dragón, el Día Internacional del Trabajo, el Día del Niño, la Fiesta del Medio Otoño y el Día Nacional. Algunas familias celebran incluso otras festividades, cuando los mayores alcanzan una cierta edad, cuando los niños cumplen un mes de vida y cuando tienen 100 días. Estas son todas fiestas tradicionales. ¿No tienen estas festividades un trasfondo de cultura tradicional? ¿Cuál es el núcleo de la cultura tradicional? ¿Tiene algo que ver con adorar a Dios? ¿Tiene algo que ver con decir a las personas que practiquen la verdad? (No.) ¿Existen festividades para que las personas ofrezcan sacrificio a Dios, vayan a Su altar y reciban Su palabra? ¿Hay alguna festividad así? (No.) ¿Qué hacen las personas en todas estas festividades? (Adorar a Satanás. Comer, beber y actividades de ocio.) En los tiempos modernos se las considera como ocasiones para comer, beber y divertirse. ¿Cuál es, pues, la fuente subyacente a la cultura tradicional? ¿De quién procede la cultura tradicional? (De Satanás.) Viene de Satanás. En el trasfondo de estas festividades tradicionales, Satanás inculca cosas en el hombre. ¿Cuáles son estas cosas? Asegurarse de que las personas recuerden a sus ancestros; ¿es esta una de ellas? Por ejemplo, durante el Festival de Limpieza de Tumbas, las personas limpian las tumbas y ofrecen sacrificios a sus antepasados. De esta forma, las personas no los olvidarán, ¿verdad? Asimismo, Satanás se asegura de que las personas recuerden ser patriotas, como en la Fiesta del Barco del Dragón. ¿Y qué hay de la Fiesta del Medio Otoño? (Reuniones familiares.) ¿Cuál es el trasfondo de las reuniones familiares? ¿Cuál es su razón de ser? (Dar prioridad a la familia y las emociones.) Comunicarse y relacionarse emocionalmente, ¿verdad? Por supuesto, ya sea celebrando el Nuevo Año Lunar o la Fiesta de los Faroles, existen muchas formas de describir las razones de fondo. Independientemente de cómo se describa la razón subyacente a las mismas, cada una de ellas es la forma en que Satanás inculca su filosofía y su pensamiento en las personas, de manera que estas se aparten de Dios y no sepan que Él existe: ofrecen sacrificios a sus antepasados o a Satanás, o simplemente tienen una excusa para comer, beber y divertirse a causa de los deseos de la carne. Cuando se celebra cada una de estas festividades, los pensamientos y las opiniones de Satanás se plantan en lo profundo de la mente de las personas sin que estas se enteren siquiera. Cuando las personas alcanzan la mediana edad o son mayores, estas cosas, estos pensamientos y los puntos de vista de Satanás ya están profundamente arraigados en sus corazones. Además, las personas hacen todo lo posible para transmitir, sin reservas, estas ideas, correctas o erróneas, a la siguiente generación. ¿Es correcto? (Sí.) ¿Cómo corrompen, pues, esta cultura tradicional y estas festividades a las personas? (Las personas se ven limitadas y atadas por las reglas de estas tradiciones, de manera que no les queda tiempo ni energía para buscar a Dios.) Este es un aspecto. Por ejemplo, todo el mundo celebra el Nuevo Año Lunar; ¿te sentirías mal si no lo hicieras? ¿No sentirías: “Ay, no celebré el Año Nuevo. Este día del Nuevo Año Lunar ha sido horrible, y no se ha celebrado; a ver si este año va ser malo”? ¿Acaso no te sentirías incómodo? (Sí.) Y quizás un poco asustado, ¿verdad? Algunos que no han hecho sacrificios a sus ancestros en años, incluso soñarán de repente que una persona fallecida les pide dinero. ¿Qué sentirán en su interior? “¡Qué triste que esta persona muerta necesite dinero para gastar! Quemaré algunos billetes por ellos. Si no lo hago, no estaría bien. Nosotros los vivos podemos meternos en problemas si no quemamos algunos billetes, ¿quién puede predecir cuándo golpeará la tragedia?”. Siempre habrá esta pequeña nube de miedo y preocupación en sus corazones. ¿Pero quién les hace sentir esta preocupación? (Satanás.) Es Satanás quien la produce. ¿No es esta una de las formas en las que Satanás corrompe al hombre? Usa diferentes medios y excusas para controlarte, amenazarte y atarte, hasta el punto de que caes en el aturdimiento, cedes y te sometes a él. Así es como Satanás corrompe al hombre. A menudo, cuando las personas son débiles o cuando no son plenamente conscientes de la situación, pueden hacer algo descabellado sin proponérselo; es decir, caen involuntariamente en las garras de Satanás y podrían hacer algo sin querer y sin saber lo que están haciendo. De esta forma corrompe Satanás al hombre. Incluso hay bastantes personas ahora que son reticentes a deshacerse de las tradiciones profundamente arraigadas y, sencillamente, no pueden renunciar a ellas. Cuando son débiles y pasivos, en especial, pueden desear celebrar este tipo de festividades y desean encontrarse con Satanás y satisfacerlo de nuevo, para así poder consolarse también ellos en su interior. ¿No es así como funciona? (Sí.) ¿Cuál es el trasfondo de estas tradiciones culturales? ¿Está la mano negra de Satanás manejando los hilos detrás del escenario? ¿Está la naturaleza malvada de Satanás manipulando y controlando las cosas? ¿Está Satanás controlando todas estas cosas? (Sí.) Cuando las personas viven en una cultura tradicional y celebran este tipo de festividades tradicionales, ¿podríamos decir que es un entorno en el que Satanás las está engañando y corrompiendo? ¿Y no se alegran de que Satanás las corrompa? ¿No son así las cosas? (Sí.) Esto es algo que reconocemos, ¿verdad? Y algo que todos sabemos.
D. Cómo usa Satanás la superstición para corromper al hombre
    Estáis familiarizados con el término “superstición”, ¿verdad? ¿Con qué entran a menudo en contacto las personas en la superstición? (Dioses falsos.) Aquí se solapan algunas similitudes con la cultura tradicional, pero no hablaremos de ellas hoy. En su lugar, expondré las que nos encontramos más habitualmente: la adivinación, leer el futuro, quemar incienso y adorar a Buda. Algunas personas practican la adivinación, otras adoran a Buda y queman incienso, mientras que a otras les leen el futuro o se lo anuncian cuando permiten que alguien lea sus rasgos faciales. ¿A cuántos de vosotros os han predicho el futuro o leído el rostro? Esto es algo que capta el interés de la mayoría de las personas, ¿verdad? (Sí.) ¿Por qué? ¿Qué tipo de beneficio consiguen las personas de la predicción del futuro y de la adivinación? ¿Qué tipo de satisfacción obtienen de ello? (Curiosidad.) ¿Es sólo curiosidad? ¡No puede ser! ¿Cuál es el objetivo de la adivinación? ¿Por qué recurrir a ella? ¿Acaso no es para ver el futuro? Algunas personas hacen que les lean el rostro para predecir el futuro, otras lo hacen para ver si tendrán o no buena suerte. Unos lo hacen para ver cómo será su matrimonio, y otros para saber qué fortuna les traerá el año que tienen por delante. Algunas personas hacen que les lean el rostro para ver cómo serán las perspectivas de sus hijos e hijas, y ver todos los aspectos de estas cosas; algunos empresarios lo hacen para ver cuánto dinero ganarán y así poder conseguir alguna orientación sobre lo que deberían hacer. Algunos quieren saber simplemente cómo será su fortuna y qué les deparará el futuro. ¿Se trata sólo de satisfacer la curiosidad? (No.) Cuando las personas hacen que les lean el rostro o este tipo de cosas, es para su propio beneficio futuro y creen que todo esto está estrechamente relacionado con su propio destino. ¿Tiene utilidad alguna de estas cosas? (No.) ¿Por qué no? ¿No es algo bueno saber algo sobre el futuro? Esto te ayuda a saber cuándo pueden golpear los problemas, por lo que podrías evitarlos si lo supieras de antemano, ¿verdad? Hacer que te predigan el futuro podría permitirte tener ciertas directrices, de forma que el año que tienes por delante pueda ser bueno y te permita enriquecerte en los negocios. ¿No es eso útil? (No.) Que sea o no útil es algo que no guarda relación con nosotros; no comunicamos hoy al respecto. Nuestra exposición no incluye este contenido y tema. ¿Cómo usa Satanás la superstición para corromper al hombre? Lo que las personas saben de cosas como la adivinación, la lectura del rostro y la predicción del futuro tiene como objetivo poder saber cuál será su suerte en el futuro y cómo es el camino que les espera; sin embargo, al final, ¿qué manos están controlando ya estas cosas? (Las manos de Dios.) Están en las manos de Dios. En cuanto a Satanás, al servirse de estos métodos, ¿qué quiere él que la gente sepa? Satanás quiere usar la lectura del rostro y la predicción del futuro para decirles a las personas que conoce su suerte futura, y quiere decirles que conoce estas cosas y las controla. Quiere aprovecharse de esta oportunidad y usar estos métodos para controlar a las personas, de forma que estas tengan una fe ciega en él y obedezcan su palabra. Por ejemplo, si te leen el rostro, si el vidente cierra sus ojos y te cuenta todo lo que te ha acontecido en las últimas décadas con perfecta claridad, ¿cómo te sentirías por dentro? De repente, sentirías: “Admiro realmente a este vidente, ¡es tan preciso! Nunca le he contado mi pasado a nadie, ¿cómo ha sabido de él?”. No resultaría demasiado difícil para Satanás conocer tu pasado, ¿verdad? Dios te ha guiado hasta hoy, y Satanás también ha corrompido a las personas todo este tiempo y te ha seguido. Satanás es un espíritu maligno; para él, el paso de las décadas por ti no es nada y no le resulta difícil saber estas cosas. Cuando sabes que lo que él dice es preciso, ¿no le estás dando tu corazón? Tu futuro y tu suerte, ¿no estás dependiendo de su control? En un instante, tu corazón sentirá algún respeto o reverencia por él, y en el caso de algunas personas, ya les ha robado el alma. Y le preguntarás de inmediato al vidente: “¿Qué debería hacer después? ¿Qué debería evitar el año que viene? ¿Qué cosas no debo hacer?”. Y después, él responderá: “No debes ir allí, no debes hacer esto, no vistas ropa de un cierto color, no deberías ir a tales y tales lugares con demasiada frecuencia, y deberías hacer más ciertas cosas…”. ¿No seguirás a rajatabla y enseguida todo lo que él dice? (Sí.) Lo memorizarás con mayor rapidez que la palabra de Dios. ¿Por qué lo memorizarás con tanta rapidez? (Es beneficioso para mí.) Cuando quieras confiar en Satanás para tener buena suerte, ¿no es el momento en que este agarrará tu corazón? Cuando haces lo que él dice y sus palabras se hacen de esta forma realidad, tal como se predijo, ¿no querrás volver enseguida y averiguar qué suerte te traerá el año siguiente? (Sí.) Harás todo lo que Satanás te diga que hagas y evitarás lo que él te diga que evites. ¿Acaso no estarás obedeciendo todo lo que él dice? Te traerá pronto bajo su ala, te descarriará y te pondrá bajo su control. Esto ocurre porque crees que lo que él dice es la verdad y porque crees que él conoce tus vidas pasadas, tu vida actual, y lo que el futuro te deparará; este es el método que Satanás usa para controlar a las personas. Pero en realidad, ¿quién está controlándolo todo? Dios mismo, no Satanás. Satanás sólo está utilizando sus artimañas en este caso para engañar a personas ignorantes, personas que sólo ven el mundo físico creyendo y confiando en él. Entonces, caerán en sus garras y obedecerán todas sus palabras. ¿Pero se rinde Satanás cuando las personas quieren creer en Dios y seguirlo? No lo hace. En esta situación, ¿están cayendo realmente las personas en las garras de Satanás? (Sí.) ¿Podríamos decir que el comportamiento de Satanás a este respecto es realmente descarado? (Sí.) ¿Por qué diríamos esto? (Satanás usa el engaño.) Hmm, porque las artimañas de Satanás son fraudulentas y engañosas. Satanás es desvergonzado e induce a error a las personas y las lleva a pensar que controla su todo y las engaña haciéndolas pensar que controla su destino. Esto provoca que las personas ignorantes lleguen a obedecerlo por completo y que las time tan sólo con una frase o dos. En su aturdimiento, se inclinan ante él. ¿Es así? (Sí.) Por tanto, ¿qué clase de métodos usa Satanás? ¿Qué dice para conseguir que creas en él? Por ejemplo, puede que no le hayas dicho a Satanás cuántas personas hay en tu familia, pero él podría decir que sois tres, incluida una hija de siete años, así como la edad de tus padres. Si tenías tus sospechas y dudas al principio, ¿no sentirías que es un poco más creíble después de oír esto? (Sí.) Y después, Satanás podría decir: “El trabajo ha sido duro para ti hoy, tus superiores no te dan el reconocimiento que mereces y siempre están obrando contra ti”. Después de oír esto, pensarías: “¡Es exactamente así! Las cosas no han ido bien en el trabajo”. Entonces, creerías a Satanás un poco más. Seguidamente, él diría algo más para engañarte, haciendo que lo creas aún más y, poco a poco, te verás incapaz de resistirte más a él o de sospechar más de él. Satanás usa simplemente unas pocas artimañas triviales, incluso pequeños trucos insignificantes, para cautivarte. Una vez cautivado, serás incapaz de orientarte, no sabrás qué hacer, y comenzarás a seguir lo que Satanás dice. Este es el método “oh tan brillante” que él emplea para corromper al hombre, por medio del cual caes involuntariamente en su trampa y te seduce. ¿Ves? Satanás te cuenta unas pocas cosas que las personas imaginan que son buenas, y después te dice lo que hacer y qué evitar, y así es como empiezas a caer sin querer por esa senda. Una vez que desciendes por ella, sólo va a crearte problemas; pensarás constantemente en lo que Satanás dijo y lo que te dijo que hicieras, y te poseerá sin que te des cuenta. ¿Por qué ocurre esto? Porque la humanidad no tiene la verdad y es por tanto incapaz de mantenerse firme ante la tentación y la seducción de Satanás. Frente a la maldad, el engaño, la traición y la malicia de Satanás, la humanidad es demasiado ignorante, inmadura y débil, ¿verdad? ¿No es esta una de las formas en las que Satanás corrompe al hombre? (Sí.) Satanás engaña y tima al hombre, en contra de la voluntad de este, poco a poco, con sus diversos métodos, porque el hombre carece de la capacidad de diferenciar entre lo positivo y lo negativo. Carece de esa estatura, así como de la capacidad de triunfar sobre Satanás.
E. Cómo usa Satanás las tendencias sociales para corromper al hombre
    ¿Son las tendencias sociales un nuevo fenómeno? (No.) ¿Cuándo comenzaron entonces? ¿Podría uno decir que lo hicieron cuando Satanás empezó a corromper a la gente? (Sí.) ¿Qué incluyen las tendencias sociales? (La forma de vestir y el maquillaje.) Esto es algo con lo que las personas entran a menudo en contacto. Estilo de vestir, moda y tendencias, este es un pequeño aspecto. ¿Hay algo más? ¿Cuentan también los dichos populares de los que hablan frecuentemente las personas? ¿Cuentan los estilos de vida que estas desean? ¿Cuentan las estrellas musicales, las celebridades, las revistas y las novelas que les gustan? (Sí.) En vuestras mentes, ¿qué aspecto de estas tendencias puede corromper al hombre? ¿Cuál de estas tendencias os seduce más? Algunas personas dicen: “Todos hemos alcanzado una cierta edad, estamos en nuestros cuarenta, cincuenta, sesenta, setenta u ochenta años y no podemos encajar con estas tendencias ni estas atraen ya nuestra atención”. ¿Es esto correcto? (No.) Otros dicen: “No seguimos a celebridades, eso es algo que los jóvenes hacen en la adolescencia y con veinte años; tampoco vestimos ropa de moda; esto es algo que hacen las personas preocupadas por su imagen”. Así pues, ¿cuáles de estas cosas pueden corromperos? (Los dichos populares.) ¿Pueden corromper a las personas estos dichos? Aquí tenéis uno, y podéis ver si lo hace o no: “Por dinero baila el perro”; ¿es esto una tendencia? ¿Acaso no es mucho peor en comparación con las tendencias de moda o culinarias que mencionasteis? (Sí.) “Por dinero baila el perro” es la filosofía de Satanás y prevalece en toda sociedad humana. Podríais decir que es una tendencia, porque se ha impartido a todos y está ahora adherida a su corazón. Las personas pasaron de no aceptar este dicho a estar cada vez más acostumbradas a él, de manera que cuando entraron en contacto con la vida real, recibieron gradualmente una aprobación tácita, reconocieron su existencia y, al final, le dieron su propio sello de aprobación. ¿Es correcto? (Sí.) ¿Acaso no es este proceso el de la corrupción del hombre por parte de Satanás? Quizás los que estáis sentados aquí no entendáis este dicho en el mismo grado, sino que cada uno tiene diferentes grados de interpretación y reconocimiento de este dicho con base en cosas que han acontecido alrededor de ellos y de sus propias experiencias personales, ¿verdad? Independientemente de cuánta experiencia tenga alguien con este dicho, ¿cuál es el efecto negativo que puede producir en el corazón de alguien? (Las personas pensarían que el dinero puede conseguirlo todo, y lo amarían.) El carácter humano de las personas en este mundo, incluidos vosotros los que estáis aquí sentados, revela algo. ¿Cómo se interpreta esto? Es la adoración al dinero. ¿Es difícil sacar esto del corazón de alguien? ¡Es muy difícil! ¡Parece que la corrupción del hombre por parte de Satanás es realmente profunda! ¿Podemos decir esto? (Sí.) Por tanto, después de que Satanás use esta tendencia para corromper a las personas, ¿cómo se manifiesta en ellas? ¿No sentís que no podríais sobrevivir un solo día sin dinero en este mundo, que ni siquiera sería posible conseguirlo un solo día? (Sí.) El estatus de las personas y su respetabilidad se basan en el dinero que tienen. Las espaldas de los pobres se encorvan por la vergüenza, mientras que los ricos disfrutan de su elevada posición. Se alzan llenos de soberbia, hablando en voz alta y viviendo con arrogancia. ¿Qué aportan a las personas este dicho y esta tendencia? ¿No consideran muchos que conseguir dinero merece la pena a cualquier precio? ¿No sacrifican muchos su dignidad y su integridad en la búsqueda de más dinero? ¿No pierden muchas más personas la oportunidad de cumplir con su obligación y seguir a Dios por culpa del dinero? ¿No es esto una pérdida para las personas? (Sí.) ¿No es Satanás siniestro al usar este método y este dicho para corromper al hombre hasta ese punto? ¿No es una artimaña maliciosa? Conforme pasas de la objeción a este dicho popular a aceptarlo finalmente como verdad, tu corazón cae por completo en las garras de Satanás y, por tanto, sin quererlo llegas a vivir por él. ¿En qué grado te ha afectado este dicho? Podrías conocer el camino verdadero, podrías conocer la verdad, pero no tienes poder para buscarla. Podrías conocer claramente la palabra de Dios, pero no estás dispuesto a pagar el precio, a sufrir para hacerlo. En su lugar, sacrificarías tu propio futuro y destino para ir en contra de Dios hasta el final. Por mucho que Dios diga, por mucho que haga, por mucho que te des cuenta de que Su amor por ti es profundo y grande, mantendrás tozudamente el rumbo y pagarás el precio para este dicho. Esto significa que el dicho controla ya tu conducta y tus pensamientos, y que preferirías que controlara tu destino antes que renunciar a él. Las personas actúan así, están controladas y manipuladas por este dicho. ¿No es este el efecto de la corrupción del hombre por Satanás? ¿No son estos la filosofía y el carácter corrupto de Satanás arraigándose en tu corazón? Si te comportas así, ¿no habrá conseguido Satanás su objetivo? (Sí.) ¿Ves cómo ha corrompido Satanás así al hombre? (No.) No lo ves. ¿Puedes sentirlo? (No.) No puedes sentirlo. ¿Ves aquí la maldad de Satanás? (Sí.) Satanás corrompe al hombre en todo tiempo y lugar. Imposibilita que el hombre se defienda de su corrupción, y lo deja desamparado ante ella. Hace que aceptes sus pensamientos, sus puntos de vista y las cosas malas que provienen de él en situaciones en las que no eres consciente y no reconoces lo que te está pasando. Las personas aceptan por completo estas cosas y no hacen excepciones. Las valoran y las consideran un tesoro, dejan que las manipulen y jueguen con ellas y, por ello, la corrupción del hombre por Satanás se vuelve más y más profunda.
    Los diversos métodos previamente descritos que Satanás usa para corromper a las personas son obvios y todo el mundo los ha experimentado; Satanás los usa y son inevitables. El hombre tiene conocimiento y algunas teorías científicas, vive con la influencia de la cultura tradicional, y cada cual es heredero de esta. El hombre se ve obligado a seguir con la cultura tradicional que Satanás le ha dado y actúa en concierto con las tendencias sociales que este provee a la humanidad. A pesar de ser inseparable de Satanás, cooperando con lo que este hace en todo momento, aceptando su astucia, su arrogancia, su malicia y su maldad, después de poseer estas disposiciones de Satanás, ¿se siente el hombre feliz o triste al vivir en medio de esta humanidad y en este mundo? (Triste.) ¿Por qué dirías eso? (Está atado por estas cosas y su vida es una lucha amarga.) Hmm. Podrías ver a alguien con gafas y con la apariencia misma de la sabiduría; podría no gritar nunca, ser siempre elocuente, razonable y además, debido a su avanzada edad, podría haber pasado por muchas cosas y ser muy experimentado; podría ser capaz de hablar con detalle sobre asuntos grandes y pequeños, y tener un fundamento sólido para lo que dice. También podría tener una serie de teorías para valorar la autenticidad y la razón de las cosas; y las personas podrían mirar su comportamiento, sus apariencias, y ver cómo se comporta, su integridad y su carácter, y no encontrar fallos en él. Personas como esta satisfacen particularmente las tendencias sociales actuales y nunca se piensa de ellos que sean anticuados; en su lugar, alguien así es vanguardista y moderno. Aunque pueda ser más viejo, nunca va rezagado respecto a los tiempos ni es demasiado anciano para aprender. Superficialmente, nadie puede encontrar un error en él, pero en su interior está total y completamente corrompido por Satanás. Superficialmente, nada es erróneo, es amable, refinado, posee conocimiento y cierta moralidad; tiene integridad y las cosas que sabe son comparables a lo que saben los jóvenes. Sin embargo, con respecto a su naturaleza y esencia, esta persona es un modelo completo y vivo de Satanás, es la imagen y semejanza de Satanás. Este es el “fruto” de la corrupción del hombre por Satanás. Lo que he dicho puede resultaros hiriente, pero es del todo cierto. El conocimiento que el hombre estudia, la ciencia que entiende, y el camino que toma para encajar con las tendencias sociales, sin excepción, son herramientas de la corrupción de Satanás. Esto es absolutamente cierto. Por tanto, el hombre vive en un carácter completamente corrompido por Satanás y no tiene forma de saber qué es la santidad de Dios o qué es Su esencia. Esto se debe a que superficialmente uno no puede encontrar fallos en las formas en que Satanás corrompe al hombre; uno no puede decir que algo es incorrecto basándose en el comportamiento de alguien. Cada cual sigue llevando a cabo su trabajo con normalidad y lleva una vida normal; lee libros y periódicos con normalidad, estudia y habla de un modo normal; algunas personas han aprendido incluso a tener la fachada de la moralidad de forma que pueden saludar, ser educadas, corteses, entender a los demás, ser amigables, ser útiles a los demás, ser caritativas, y evitarán irritarse con los demás y aprovecharse de ellos. Sin embargo, su carácter satánico corrupto está profundamente arraigado en ellos; su esencia no puede cambiarse apoyándose en el esfuerzo externo. El hombre no es capaz de conocer la santidad de Dios a causa de esta esencia, y a pesar de que la esencia de la santidad de Dios se ha hecho pública al hombre, este no la toma en serio. Esto se debe a que Satanás ya ha llegado a poseer completamente los sentimientos, las ideas, los puntos de vista y los pensamientos del hombre a través de diversos medios. Esta posesión y corrupción no es temporal u ocasional; está presente en todas partes y en todo momento. Por tanto, muchas personas que han creído en Dios durante tres o cuatro años, incluso cinco o seis, siguen aferrándose a los pensamientos y opiniones que Satanás ha inculcado en ellas como si estuvieran agarrando un tesoro. Como el hombre ha aceptado la naturaleza malvada, arrogante y maliciosa de Satanás, inevitablemente en sus relaciones interpersonales hay frecuentes conflictos, discusiones e incompatibilidades, creados como consecuencia de la naturaleza arrogante de Satanás. Si este le hubiera dado a la humanidad cosas positivas —por ejemplo, si el confucianismo y el Taoísmo de la cultura tradicional que el hombre aceptó se consideraran cosas buenas— los tipos similares de persona deberían ser capaces de llevarse bien entre sí tras aceptar esas cosas, ¿verdad? ¿Por qué existe, pues, una división tan grande entre personas que han aceptado las mismas cosas? ¿Por qué ocurre esto? Se debe a que estas cosas proceden de Satanás y que este crea división entre las personas. Las cosas que Satanás provee, por muy dignas o grandes que parezcan en la superficie, traen al hombre o hacen surgir en su vida tan sólo arrogancia, y nada más que la astucia de la naturaleza malvada de Satanás. ¿No es eso cierto? Alguien que pudiera enmascararse, poseer riqueza de conocimiento o tener una buena educación lo tendría difícil para ocultar su carácter satánico corrupto. Por muchas maneras que usara para camuflarse, si pensaras en esa persona como una santa, o si pensaras que era perfecta, o que era un ángel, por muy pura que te pareciera, ¿cómo sería su vida detrás del escenario? ¿Qué esencia verías en la revelación de su carácter? Sin duda verías la naturaleza malvada de Satanás. ¿Se podría decir esto? (Sí.) Digamos, por ejemplo, que conocéis a alguien cercano a quien consideráis una buena persona, o que te pareció una buena persona; quizás alguien a quien habéis idolatrado. Con tu estatura actual, ¿qué piensas de esa persona? Primero, miras si este tipo de persona tiene o no humanidad, si es honesta, si tiene amor verdadero por las personas, si sus palabras y sus actos benefician y ayudan a los demás. (No.) ¿Qué es, en realidad, la pretendida benignidad, el amor o la bondad que se está revelando aquí? Es todo fachada, todo falso. Esta fachada detrás del escenario tiene un propósito malvado ulterior: hacer que se adore e idolatre a esa persona. ¿Veis esto claramente? (Sí.)
    ¿Qué le aportan a la humanidad los métodos que Satanás usa para corromperla? ¿Hay algo positivo en ello? (No.) Primero, ¿puede el hombre diferenciar entre el bien y el mal? (No.) Ves, en este mundo, se trate de una persona importante, de un periódico, o de alguna emisora de radio, si dicen que esto o aquello es bueno o malo, ¿es esto preciso? (No.) ¿Es esto correcto? (No.) ¿Son justas sus valoraciones de los acontecimientos y las personas? (No.) ¿Hay verdad en ello? (No.) ¿Valora este mundo o la humanidad las cosas positivas y negativas basándose en el estándar de la verdad? (No.) ¿Por qué no tienen las personas esa capacidad? Las personas han estudiado demasiado conocimiento, saben demasiado sobre ciencia; ¿no son sus capacidades suficientemente grandes? ¿Por qué no pueden diferenciar entre cosas positivas y negativas? ¿Por qué ocurre esto? (Porque las personas no tienen la verdad; la ciencia y el conocimiento no son la verdad.) Lo único que Satanás trae a la humanidad es maldad y corrupción, y carece de la verdad, de la vida y del camino. Con la maldad y la corrupción que Satanás aporta al hombre, ¿puedes decir que Satanás tiene amor? ¿Puedes decir que el hombre tiene amor? Algunas personas podrían decir: “Estás equivocado, hay muchas personas por el mundo que ayudan a los pobres o las personas sin hogar. ¿No son buenas personas? También existen organizaciones caritativas que hacen buenas obras, ¿no es para bien todo el trabajo que hacen?”. ¿Qué decimos entonces sobre esto? Satanás usa muchos métodos y teorías diferentes para corromper al hombre; ¿es esta corrupción un concepto confuso? No, no lo es. Satanás también lleva a cabo cosas prácticas, que incluyen una diversidad de cosas falsas disfrazadas de buenas, así como acciones muy engañosas, que hace con su propia intención y propósito. Las personas corruptas y Satanás son lo mismo; también están en este mundo y en la sociedad promoviendo un punto de vista o teoría. En cada dinastía y en cada época promueven una teoría e inculcan algunos pensamientos en los hombres. Estos pensamientos y teorías se arraigan gradualmente en los corazones de las personas, y entonces estas comienzan a vivir por ellos; ¿no se convierten involuntariamente en Satanás? ¿No son las personas una sola cosa con Satanás? Cuando las personas se hacen uno con Satanás, ¿cuál es su actitud hacia Dios al final? ¿No es la misma que Satanás tiene hacia Dios? Nadie se atreve a admitir esto, ¿verdad? ¡Es muy aterrador! Las personas son Satanás, y su naturaleza es la propia naturaleza de Satanás. ¿Por qué digo que la naturaleza de este es malvada? Esto se determina y se analiza con base en lo que Satanás ha hecho y las cosas que ha revelado; que Satanás es malvado está fundamentado. Si sólo dijera que lo es, ¿qué pensaríais? Pensaríais: “Obviamente, Satanás es malvado”. Por tanto, te preguntaré: “¿Qué aspecto de Satanás es malvado?”. Si dices: “La resistencia de Satanás a Dios es malvada”, seguirás hablando sin claridad. Ahora que hemos dado los detalles de esta forma, ¿tenéis entendimiento respecto al contenido específico de la esencia de la maldad de Satanás? (Sí.) Ahora que habéis tenido este entendimiento de la naturaleza malvada de Satanás, ¿cuánto entendéis sobre vosotros? ¿Están vinculadas estas cosas? (Sí.) ¿Os hace daño este vínculo? (No.) ¿Es útil para vosotros? (Sí.) ¿Cómo de útil? (¡Una gran ayuda!) Hablad con detalle; no oiré palabras ambiguas. ¿A cuánto equivale este “muy grande”? (Sabemos qué cosas odia Dios, qué cosas van contra Él; nuestros corazones tienen un poco claras estas cosas.) Hmm, ¿hay algo más que añadir? Cuando hablo acerca de la esencia de la santidad de Dios, es necesario que hable sobre la esencia malvada de Satanás, ¿cuál es tu opinión? (Sí, es necesario.) ¿Por qué? (La maldad de Satanás da mayor relieve a la santidad de Dios.) ¿Es esto así? Esto es parcialmente correcto por cuanto, sin la maldad de Satanás, las personas no sabrán de la santidad de Dios; esto es correcto. Sin embargo, si dices que la santidad de Dios sólo existe por su contraste con la maldad de Satanás, ¿es esto correcto? Este argumento es erróneo. La santidad de Dios es Su esencia inherente; aunque Dios la revele o Dios actúe, posee esta esencia inherente que se revela de forma natural, es intrínseca a Dios mismo, y siempre ha existido, pero el hombre no puede verla. El hombre vive en el carácter corrupto de Satanás y en su esencia corrupta, y no sabe de la santidad o del contenido específico de la santidad de Dios. ¿Es esto correcto? Por tanto, ¿piensas que es necesario que comunicamos primero sobre la esencia malvada de Satanás? (Sí, lo es.) Ves, hemos hablado sobre varios aspectos de la singularidad de Dios y no mencionamos la esencia de Satanás, ¿verdad? Algunas personas pueden expresar alguna duda como: “Estás hablando sobre Dios mismo, ¿por qué estás hablando siempre sobre cómo corrompe Satanás a las personas y lo malvada que es la naturaleza de este?”. ¿Has atenuado estas dudas? (Sí.) ¿Cómo lo hiciste? (Por medio de la enseñanza de Dios, diferenciamos lo que es malo.) Cuando las personas tengan discernimiento del mal y cuando tengan una definición precisa del mismo, cuando puedan ver claramente el contenido específico y la manifestación del mal, su fuente y su esencia, cuando la santidad de Dios se exponga ahora, las personas serán realmente conscientes, o lo reconocerán con claridad como la santidad de Dios, como la verdadera santidad. Si no expongo la maldad de Satanás, algunas personas creerán erróneamente que algo que las personas hagan en la sociedad y entre las personas o algo en este mundo puede estar relacionado con la santidad. ¿No es erróneo este punto de vista? (Sí.) He enseñado por tanto sobre la esencia de Satanás. ¿Qué tipo de entendimiento de la santidad de Dios habéis conseguido a través de vuestras experiencias en años recientes, a partir de ver la palabra de Dios y experimentar Su obra? Sigue adelante y habla sobre ello. No tienes que emplear palabras agradables al oído, sino hablar basándote en tus experiencias; ¿es la santidad de Dios sólo Su amor? ¿Es simplemente el amor de Dios lo que describimos como santidad? Eso sería demasiado parcial, ¿verdad? ¿No sería parcial? (Sí.) Por tanto, además del amor de Dios, ¿hay otros aspectos de la esencia de Dios que hayáis visto? (Sí.) ¿Qué habéis visto? (Dios detesta las festividades y las fiestas, las costumbres y las supersticiones; esta es la santidad de Dios.) Dijiste simplemente que Dios detesta ciertas cosas; Él es santo y, por tanto, detesta cosas; ¿es esto lo que significa? (Sí.) En su raíz, ¿qué es la santidad de Dios? ¿La santidad de Dios no tiene un contenido sustancial, sólo que Él detesta cosas? ¿Estáis pensando en vuestra mente: “Como Dios odia estas cosas malas, se puede decir que Él es santo”? ¿No hay especulación aquí? ¿No es esto una forma de deducción y juicio? ¿Cuál es el mayor tabú cuando se trata de entender la esencia de Dios? (Dejar atrás la realidad.) Es cuando dejamos atrás la realidad para hablar de doctrinas; este es el mayor tabú. ¿Algo más? (La especulación y la imaginación.) La especulación y la imaginación también son tabúes muy fuertes. ¿Por qué no son útiles la especulación y la imaginación? ¿Acaso aquello sobre lo que especulas e imaginas son cosas que puedes ver realmente? (No.) ¿Son la verdadera esencia de Dios? (No.) ¿Qué más es tabú? ¿Es tabú la mera enumeración de un montón de palabras que suenan bien sobre la esencia de Dios? (Sí.) ¿No es esto jactancioso y carente de sentido? El juicio y la especulación no tienen sentido, como tampoco lo tiene el escoger palabras que suenen bien. ¿Hay algo más? La alabanza vacía tampoco tiene sentido, ¿verdad? (Sí.) ¿Disfruta Dios escuchando a las personas decir este tipo de sinsentido? (No, no lo hace.) ¿Cuál es un sinónimo de “no disfrutar” de algo? (Sentirse incómodo.) ¡Él se siente incómodo oyéndolo! Dios guía y salva a un grupo de personas, y después de que este grupo de personas oiga Sus palabras nunca entiende lo que Él quiere decir. Alguien puede preguntar: “¿Es bueno Dios?” y ellos responderán: “¡Bueno!”. “¿Cómo de bueno?”. “¡Muy, muy bueno!”. “¿Ama Dios al hombre?”. “¡Sí!”. “¿Cuánto?”. “¡Mucho, mucho!”. “¿Puedes describir el amor de Dios?”. “¡Es más profundo que el mar, más alto que el cielo!”. ¿No es esto un sinsentido? ¿No es un sinsentido similar a lo que acabáis de decir respecto a que “Dios odia el carácter corrupto de Satanás y, por tanto, Dios es santo”? (Sí.) ¿No es un sinsentido lo que acabáis de decir? ¿De dónde procede la mayoría de las cosas sin sentido que se dicen? (De Satanás.) Vienen de Satanás. Las cosas sin sentido que se dicen proceden principalmente de la irresponsabilidad de las personas y su irreverencia a Dios. ¿Podríamos decir esto? (Sí.) No tenías ningún entendimiento, pero aun así dijiste un sinsentido, ¿no es esto ser irresponsable? ¿No es irrespetuoso hacia Dios? Has estudiado un poco de conocimiento, entendido un poco de razonamiento y un poco de lógica, que has usado aquí y, además, lo has hecho así para conocer a Dios. ¿Piensas que Dios se siente incómodo oyendo esto? ¿Cómo podéis conocer a Dios usando estos métodos? ¿No suena raro? Por tanto, cuando se trata del conocimiento de Dios, uno debe ser muy cauto; cuando conoces a Dios, habla sólo de ello. Habla sinceramente y de forma práctica, y no adornes tus palabras con cumplidos rutinarios ni uses la adulación; Dios no lo necesita y este tipo de cosa procede de Satanás. El carácter de Satanás es arrogante y le gusta ser adulado y oír palabras bonitas. Satanás se complacerá y estará feliz si las personas enumeran todas las palabras biensonantes que han aprendido y las usan para Satanás. Pero Dios no lo necesita; Él no necesita halagos ni adulación, ni exige que las personas hablen sinsentidos y lo adoren ciegamente. Dios aborrece y ni siquiera escuchará la alabanza y la adulación que no concuerdan con la realidad. Por tanto, cuando algunas personas alaban ciegamente a Dios y lo que dicen no encaja con lo que hay en su corazón, y cuando hacen votos ciegamente a Dios y oran a Él de un modo descuidado, Él no las escucha en absoluto. Debes asumir la responsabilidad de lo que dices. Si no sabes algo, simplemente reconócelo; si sabes algo, exprésalo de una forma práctica. Ahora bien, en cuanto al contenido real de la santidad de Dios, ¿tenéis un entendimiento específico de ella? Ahora no os atreveréis a decir cosas sin sentido, ¿verdad? No estáis diciendo sinsentidos, pero no podéis parar de hablar, por lo que deberíais tener algún entendimiento, ¿verdad? ¿Estáis pensando en ello? Lo estáis gestionando concienzudamente, ¿verdad? Puedes decir unas cuantas cosas ahora. (Cuando mostré rebeldía, cuando transgredí, recibí el juicio y el castigo de Dios, y de esta forma vi la santidad de Dios. Y cuando caí en situaciones y entornos que no se conformaban a mis expectativas, oré sobre estas cosas y busqué los propósitos de Dios; y cuando Él me esclareció y me guió con Sus palabras, vi Su santidad.) Hmm, esto es de tu propia experiencia, ¿verdad? (Cuando Dios guía a las personas a lo largo del camino, y conforme tiene dominio sobre las personas, en ello veo la santidad de Dios. Realmente, en lo que Dios acaba de decir respecto a cómo Satanás corrompe al hombre y este ha estado viviendo bajo su corrupción y aflicción, el hombre no tiene control sobre esto; veo verdaderamente la santidad de Dios por medio de la obra de Dios en el hombre.) (He visto a partir de lo que Dios ha hablado que Satanás ha corrompido y dañado al hombre así. Sin embargo, Dios lo ha dado todo para salvarnos y en ello veo la santidad de Dios.) Esta es una manera realista de hablar y es conocimiento verdadero. ¿Hay diferentes opiniones sobre esto? (No sé si mi entendimiento es o no correcto. En la enseñanza que Dios nos acaba de hacer, veo la maldad de Satanás en las cosas que este dice y hace. En la primera enseñanza, dijo que Dios le indicó al hombre lo que podía comer y lo que no, y que las palabras de Dios revelaban limpieza y franqueza; en ello veo la santidad de Dios. Eso es lo que puedo añadir.) Hmm. En lo que habéis oído decir a estas personas, ¿a las palabras de quién decís Amén en su mayor parte? ¿Qué discurso o qué exposición se ha acercado más al tema del que hemos comunicado hoy? ¿Cuál fue más realista? ¿Cómo fue la comunicación de la última hermana? (Buena.) Dices Amén a lo que ella ha dicho; ¿qué ha dicho ella que diera justo en el blanco? Puedes ser directo, di lo que tengas que decir y no te preocupes por equivocarte. (En las palabras que la hermana acaba de decir, oí que la palabra de Dios es directa y muy clara, no es en absoluto como los rodeos que da Satanás al hablar. Vi la santidad de Dios en esto.) Hmm, esto es parte de ello. ¿Habéis oído todos lo que se acaba de decir? (Sí.) ¿Era correcto? (Sí.) Démosle a la hermana una ronda de aplausos. Muy bien. Veo que habéis ganado algo en estas dos enseñanzas recientes, pero debéis seguir trabajando duro. La razón por la que debéis esforzaros es que el entendimiento de la esencia de Dios es una lección muy profunda; no es algo que se llegue a entender de la noche a la mañana o de lo que se pueda hablar con claridad en tan sólo unas pocas palabras.
    Cada aspecto del carácter satánico corrupto de las personas, el conocimiento, la filosofía, sus pensamientos y sus puntos de vista, así como los aspectos personales, les dificultan en gran manera el conocimiento de la esencia de Dios. Por tanto, cuando oís estos temas, algunos pueden estar más allá de vuestro alcance, es posible que no entendáis algunos, y no podréis hacer coincidir otros con la realidad. Independientemente de ello, he oído cómo entendéis la santidad de Dios y sé que en vuestros corazones estáis empezando a reconocer lo que he dicho y enseñado sobre la santidad de Dios. Sé que en vuestros corazones está empezando a germinar vuestro deseo de entender la esencia de la santidad de Dios. ¿Pero qué me hace incluso más feliz? Que algunos de vosotros ya seáis capaces de usar las palabras más simples para describir vuestro conocimiento de la santidad de Dios. Aunque esto es algo sencillo de decir, y lo he dicho antes, en los corazones de la mayoría de vosotros esto ha de ser aprobado aún o hacer mella. Sin embargo, algunos de vosotros han seguido estas palabras a rajatabla; esto es bastante bueno y es un buen comienzo. Espero que en los temas que os parezcan profundos o en aquellos que están fuera de vuestro alcance, continuéis participando, y habléis más y más sobre ellos. Para esos asuntos que están fuera de vuestro alcance habrá alguien para daros más dirección. Si os involucráis en hablar más respecto a los ámbitos que están ahora dentro de vuestro alcance, el Espíritu Santo hará Su obra y llegaréis a un entendimiento mayor. Entender la esencia de Dios y conocerla proporciona una ayuda inconmensurable para la entrada en la vida de las personas. Espero que no ignoréis esto ni lo veáis como un juego, porque conocer a Dios es la base y el fundamento esencial para la fe del hombre en Dios y para su búsqueda de la verdad y la salvación; y es algo de lo que no se puede prescindir. Si el hombre cree en Dios, pero no lo conoce, y si vive en algunas letras y doctrinas, nunca conseguirás la salvación aunque actúes y vivas de acuerdo con las palabras superficiales de la verdad. Es decir, si tu fe en Dios no se basa en conocerle a Él, entonces tu fe no significa nada. Lo entiendes, ¿verdad? (Si, lo entendemos.) Aquí acabará por hoy nuestra comunicación.
                                                                      4 de enero de 2014